Los expertos dan por sentado que a 31 de diciembre había más de 200.000 hectáreas de narcocultivos en Colombia. Mi análisis muestra que la cifra será aun mayor. Para fines de 2015 había 159.000, un 42 % más que un año antes. Desde entonces los elementos que han contribuido a la expansión desatada de narcocultivos solo se han agravado. Si la tasa de crecimiento de 2015 se mantuviera, y en realidad es posible que sea aun mayor, estaríamos en alrededor de 223.000. Durante Santos los narcocultivos se han casi cuadruplicado.
Dos son los motivos centrales de ese crecimiento desorbitado: la suspensión de la fumigación área con glifosato pactada con las Farc y los beneficios que se sellaron en el “acuerdo de paz”. Ahí se acordó la renuncia a la persecución...