Mientras en La Habana el jefe negociador del Gobierno afirmaba con un mutis de aquiescencia que alias Iván Márquez le había dicho que los guerrilleros dados de baja por nuestros soldados estaban en manso tránsito hacia una zona de concentración, el Comandante del Ejército demostraba sobre la carta y con documentos, la realidad de los hechos en el sur de Bolívar.
La operación militar se condujo contra una célula del eln denunciada por la comunidad cansada de extorsión y amedrentamiento. Un terrorista superviviente declaró que los dos muertos y él eran del frente 57 de las farc y entregó material comprometedor que confirma lo que denunciamos hace varios años: las farc están “trabajando” con el eln estratégica y oportunamente, en una llave de presión...