Muy desapercibido ha pasado el documento que Fatou Bensouda, Fiscal de la Corte Penal Internacional, envió a la Corte Constitucional el 18 de octubre después de que esta última le pidiese –a título de amiga del tribunal– su intervención a raíz del control de constitucionalidad que hace sobre las normativas que incorporan la Justicia Especial para la Paz. Sin embargo, quien haga una lectura atenta del escrito descubrirá que la intención de la autora no es solo ser “de utilidad para la Corte constitucional” o, “sin prejuzgar”, “brindar los puntos de vista de la Fiscalía sobre aspectos relevantes”; por el contrario, tan “desprevenido” texto contiene múltiples y gravísimas amenazas de intervención de esa Corte en Colombia.
En efecto, los cinco principales...