Por Jesús Eduardo Vélez Mejía
Como cada alcalde manda en su ciudad y en su «cuarto de hora», recuerdo que desde siempre he visto cómo cada alcalde y sus expertos en movilidad han puesto en marcha cantidad de estrategias para tratar de mejorar la misma con relativos aciertos en nuestra querida Medellín.
Paraderos de buses con y sin sillas y techos, glorietas virtuales, carriles preferenciales, separadores, reguladores de velocidad y mil ideas más, unidas a los hoy carriles «solo bus», intentan y a su manera mejorar la caótica situación de la ciudad.
En el caso de los carriles «solo bus» tendríamos que preguntarnos si además de la millonaria inversión en pintura y demarcación, ¿para qué más han servido?, ya que cuando por algún motivo los cruzo en...
