viernes
7 y 9
7 y 9
Una desgracia que la pólvora, además de las tragedias humanas que genera, dispare la contaminación en el aire del Aburrá, de por sí, la región más contaminada del país, principalmente, por un parque automotor obsoleto, su alta densificación urbana y su topografía que impide que el aire circule libremente. En la noche de la alborada subió un 21 % la concentración de elementos nocivos para la salud en atmósfera, si se le compara con la del 29 de noviembre, según los registros del Siata. Contaminar el aire es tan grave como hacerlo con el agua. No juegue con su vida y la de los demás. No a la pólvora.