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Una carrera en la que no se sabe cuándo se pasará la raya de meta. Eso es lo que acaba de iniciar la Nasa: la conquista de Marte.
Hay dos robots en su superficie y cinco naves en órbita, pero llevar humanos para pisar el suelo marciano y regresarlos, una misión de meses, es otro asunto.
Esta semana la agencia espacial dio un paso en firme para preparar el vuelo: convocó a los ciudadanos a enviar sus ideas sobre la misión, tal como ha hecho en ocasiones pasadas.
Los interesados en el desafío deberán aportar ideas sobre los elementos básicos, como vivienda, agua, alimentos, aire, comunicación, ejercicio, interacciones sociales y medicina, pero también pueden remitirse ideas creativas más allá de esos ejemplos.
Deben ser ideas posibles, técnicamente factibles, económicamente sostenibles y que requieran mínimo soporte desde la Tierra.
Hasta tres de esas ideas serán escogidas y recibirán de 5.000 a 15.000 dólares.
Es que se requiere el concurso de todos para mantener la presencia humana en el planeta rojo, a más de 225 millones de kilómetros.
El ser humano solo ha llegado a la Luna, a unos 380.000 kilómetros.
Y la Luna será un trampolín hacia la misión.
La próxima gran tarea, dice la Nasa, será una misión robótica para capturar en el espacio un asteroide de unos 4 metros y llevarlo a una órbita estable alrededor de la Luna.
El lanzamiento de la misión robótica está previsto para finales de esta década.
En los años 20, aún sin una fecha exacta, astronautas viajarán en la nueva cápsula Orión hacia ese objetivo: llegarán al asteroide, recogerán unas muestras y las traerán a la Tierra para análisis.
Esta experiencia ayudará a examinar el nuevo sistema eléctrico de propulsión más allá de una órbita baja alrededor del planeta, básico para el suministro de carga para asistir a los humanos que viajen a territorio marciano.
Será en 2018 cuando inicie operación el sistema espacial de lanzamiento de cohetes (SLS), en el que años después irá la cápsula Orión con los astronautas para la exploración del espacio profundo.
Un sistema de impulsión equivalente a 135 motores como los que usan los Boeing 747, otorgando 8,4 millones de libras de fuerza.
Este componente, la cápsula Orión que remplaza las Apolo usadas para las misiones tripuladas a la Luna, fue probada por primera vez con éxito en diciembre aunque faltan varias pruebas más.
En algún momento de la próxima década llevará 4 tripulantes al espacio, a diferencia de los 3 de las Apolo.
Por las etapas que faltan y por la seguridad que se debe tener en una misión de al menos 21 meses, Marte será conquistado tal vez en la década del 30.
Pero la misión comenzó en firme. Será el segundo gran paso de la humanidad, tras haber ido a la Luna.
Los aportes de todos serán bienvenidos.