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Todos los años se presenta, pero hay ocasiones especiales como esta: la lluvia de meteoros perseidas podría dar una gran sorpresa a los observadores con un pico de hasta 200 por hora.
Es uno de los espectáculos celestes más llamativos. Y las perseidas es, junto a las gemínidas en diciembre, parte del dúo de las mejores lluvias.
Este año habrá una ventaja: la Luna se ocultará pasada la medianoche. Esto asegura una mejor observación.
Porque por lo general la actividad es más alta en las horas previas al amanecer.
¿Pero cuándo será el momento álgido? Desde hoy en la noche, con mejor pronóstico al amanecer de viernes, pero también sábado y domingo puede apreciarse el rezago que de todas formas es nutrido en meteoros.
Como todos los fenómenos de la naturaleza es impredecible. En ocasiones ha habido frustración, mas en algunos otros una cantidad que nadie pensaba.
El pico dura medio día. Por eso hay que estar atentos desde esta noche hasta el amanecer del viernes.
Esta vez hay motivos para pensar en que se cumplirán los pronósticos. La Tierra pasa por una estela de residuos dejados por un cometa (ver recuadro), que en esta ocasión han sido impulsados más hacia el planeta por la acción del planeta Júpiter.
“Este año la influencia de Júpiter ha movido hacia la Tierra las estelas (de meteoros) de los años 1079, 1479 y 1862, así que los especialistas pronostican un pico con el doble del número usual de meteoros”, explicó Bill Cooke, jefe de la Oficina de Ambiente de Meteoros de la Nasa.
Los meteoros son granos como de arena, solo unos un poco más grandes, y todos se consumen en la atmósfera al ingresar formando la estela que permite verlos. Pocas veces alguno tiene el tamaño para llegar a la superficie como un meteorito.
Y de vez en cuando se observa uno muy brillante que deja su huella varios segundos, que puede terminar en una explosión. Es un bólido.
Cómo y dónde mirar
La observación de una lluvia de meteoros no requiere ningún equipo. Sí se necesitan cielos oscuros, así que en las ciudades se privan del espectáculo.
La lluvia se puede ver desde cualquier lugar con esas condiciones: en el Valle de Aburrá, afueras de Medellín, Antioquia y el país.
Lo mejor es tenderse en el suelo sobre una manta para tener mayor dominio del cielo y evitar dolor en el cuello.
Al mirar así podrá ver no solo las perseidas sino meteoros de otra lluvia aún activa, delta acuáridas, y varias constelaciones como Piscis, Pegaso, Andrómeda, Acuario, el Águila, Capricornio, Aries y la Ballena.
Se llaman perseidas porque parecen provenir de la constelación Perseo, pero pueden salir de otros lados y usted no tiene que conocer la constelación.