viernes
7 y 9
7 y 9
Para las personas, una plaga. Aparecen en los rincones de las viviendas, o por donde hay comida. Los ratones llevan 15.000 años conviviendo con los humanos, aprovechando lo que estos les ofrecen.
Llegaron antes de que los pueblos se asentaran del todo a cultivar la tierra, cuando los nómadas permanecían algún tiempo más largo en un sitio.
Eso dice un estudio presentado en Proceedings of the National Academy of Sciences.
“La investigación suministra la primera evidencia de que hace al menos 15 000 años, los humanos vivían lo suficiente para impactar las comunidades animales, derivando en la presencia dominante del ratón doméstico (o casero)”, explicó Fiona Marschall, coautora y profesora en Washington University.
“Está claro que la ocupación permanente de esos asentamientos tenía consecuencias de largo plazo para las ecologías locales, la domesticación de animales y las sociedades humanas”.
Entonces fueron la cazadores-recolectores y no los primeros agricultores quienes transformaron las relaciones con los mamíferos pequeños.
Al encontrar acceso a abrigo y comida, los ratones iniciaron el camino al comensalismo, una fase inicial de la domesticación en la cual una especie aprende a beneficiarse de la interacción con humanos.
Una muestra más de que las formas como los humanos han moldeado el mundo natural están atadas a distintos niveles de movilidad humana. Y ocurrió miles de años antes de lo creído.
Al examinar variaciones de especies pequeñas en la forma de los molares de ratones fosilizados tan antiguos como hace 200 000 años, los investigadores construyeron una línea del tiempo mostrando cómo las poblaciones de los distintos ratones fluctuaba en el sitio Natufiano durante períodos de movilidad humana variada.
Los análisis revelaron que la movilidad humana influyó en las relaciones competitivas de dos especies de ratones, el casero Mus musculos domesticus y el de cola corta M. macedonicus que continúan viviendo en asentamientos en Israel.
Los hallazgos indican que los ratones domésticos comenzaron a meterse en los hogares del valle del Jordán de los cazadores-recolectores natufianos hace cerca de 15 000 años y sus poblaciones surgieron o decayeron según se movían las comunidades.