Este celular también es una impresora de fotos Polaroid

Así se ve el Moto Mod Polaroid Insta-Share Printer adaptado en el teléfono. FOTO: Cortesía Lenovo.

Cuando se empezó a hablar de celulares modulares la idea no caló completamente entre los usuarios de teléfonos inteligentes, de hecho Google desistió de su proyecto conocido como Project Ara, que buscaba crear equipos compuestos por un marco en el que se conectaban seis módulos para personalizarlo según las necesidades de cada persona. No obstante, una compañía que también le apostó a este tipo de teléfonos sí ha podido mantener a flote la idea y conquistar de a poco a sus usuarios con el único equipo modular que sobrevive en el mercado: el Moto Z.

El celular se conoció en junio de 2016 durante el festival Lenovo Tech World, y en su creación participó el colombiano Rubén Castaño, líder global del Centro de Experiencia y Diseño de MBG (Mobile Business Group) Lenovo. El Moto Z es un teléfono destacado entre la gama alta de Android, sus características en cámara, procesamiento, pantalla, entre otras, son premium; y adicionalmente incluyó la cualidad de poder adaptarles los denominados Moto Mods, que se ponen en el celular para transformarlo en un equipo con mayores prestaciones.

Justamente el nuevo Moto Mod que dio a conocer la compañía es el Polaroid Insta-Share Printer, una impresora miniatura que se ajusta en la parte de atrás del celular gracias a unos imanes con las que cuentan tanto el Moto Mod como el teléfono. Cada vez que se conecte el módulo con su batería completa al celular se podrán imprimir hasta 20 fotografías, comunicó Lenovo.

Este Moto Mod es compatible con ambas generaciones del Moto Z, la que salió el año pasado y la más reciente, compuesta por dos modelos: el Moto Z2 Play y el Moto Z2 Force, ambos ya en el mercado en Colombia. Sobre su llegada al país aún no hay fecha definida, sin embargo sí se pueden conseguir otros de los Mods, como un bafle de JBL, una batería, una cámara, un proyector, una cámara 360 y hasta un control de videojuegos llamado Moto Gamepad.

LG también tuvo su teléfono modular, el LG G5, pero tampoco sobrevivió y el modelo sucesor no incluyó características que permitieran adaptarle una cámara o una batería, los módulos que estaban disponibles para el G5.