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La reciente decisión tomada por Microsoft (adquirir la empresa Activision Blizzard) sería la mayor compra hecha por la compañía hasta la fecha, una apuesta contundente por el sector de los videojuegos y una entrada segura a competir directamente con la multinacional Sony.
Producto de esta decisión, Microsoft ofrecerá en Xbox Game Pass y PC Game Pass (su modelo de negocio bajo suscripción que a día de hoy cuenta con más de 25 millones de usuarios) los siguientes videojuegos: Call of Duty, Warcraft, Candy Crush, Tony Hawk, Diablo, Overwatch, Spyro, Hearthstone, Guitar Hero, Crash Bandicoot y StarCraft.
Además de ser una decisión significativa para la empresa fundada por Bill Gates, la compra, valorada en 68.700 millones de dólares, sería también una de las 20 mayores operaciones de este tipo en la historia.
Aunque se está a la espera del escrutinio de los reguladores antimonopolio, el anuncio fue tan significativo que Sony se desplomó, casi inmediatamente, más de un 9% en la bolsa.
"Piensan (los accionistas) que Microsoft hará que todos los juegos de Activision Blizzard sean exclusivos (de Xbox), perjudicando las ventas de PlayStation y ayudando a Microsoft a cerrar la brecha de ventas de 'hardware' de Sony", indicó el consultor de la industria Serkan Toto al valorar el desplome bursátil en sus redes sociales.
Microsoft, que ya cuenta con una importante presencia en el mundo de los videojuegos, tiene entre sus productos más relevantes la consola y títulos como "Minecraft".