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A José Domingo Betancourt le sonaban las letras, esas que titulaban las carátulas de la colección de Long Play de sus papás, surtidas de toda clase de tipografías. Desde las curvas de la salsa hasta los ángulos marcados de la música clásica pasaron por el filo de su lápiz para ser replicados en papel.
“Pasé mucho tiempo de mi infancia calcando estas letras, aprendiendo desde lo empírico y dándome cuenta de lo que los símbolos comunicaban, por ejemplo lo robusto y angular en el rock, o lo esbelto y colorido en el pop. Esos trazos hablan también”, comenta José Domingo, explicando cómo nació su pasión por la caligrafía, que lo llevó a dirigir su propia casa de diseño en Medellín.
Como José Domingo son miles las personas que alimentan su afición a la caligrafía por medio de los tutoriales, concursos y muestras que en redes sociales como Instagram, rescatan una tradición que ha existido desde sus los inicios de la historia.
“Nos hemos acostumbrado tanto a escribir en móviles y ordenadores que cuando la gente lo ve a uno escribiendo se fascina, les parece increíble que esto se pueda hacer a mano, como si las letras no se hubieran hecho primero a pulso. Es mágico rescatar esa pasión por cada tipografía”, explica Betancourt.
Desde otro punto de vista, Camilo Alzate, especialista en diseño de tipografía de la Universidad de Buenos Aires, y administrador del perfil en Instagram @Camilotype, comenzó su aprendizaje sobre caligrafía viendo tutoriales en Youtube y leyendo manuales online, un aprendizaje que replicaría años después en su carrera como docente de áreas gráficas en la Universidad de Medellín y en el Área Andina.
“Al principio, yo era de los más reacios a las redes sociales, pero viendo el potencial que le da a los trabajos y la visibilidad que tienen nuevos talentos, decidí abrir la cuenta y por ahí he logrado concretar muchos proyectos. Las redes lograron sacar a la caligrafía de ese rincón en donde estuvo por décadas, como relegada a marcar diplomas y tarjetas”.
Etiquetas de aficionados
Diseñadores gráficos, tipógrafos, artistas y admiradores sin ninguna destreza pueden apreciar, difundir y hasta aprender los principios básicos de esta disciplina en redes sociales como Instagram y Twitter. Estas son algunas de las etiquetas que utilizan:
#36daysoftype: Más que una etiqueta se trata de un evento anual a escala mundial, este año programado del 29 de marzo al 3 de mayo, en el que cualquier usuario puede proponer su creación (cada día tiene asignado un carácter: 26 letras y 10 dígitos). Se trata de marcar la imagen o video, que puede ser hecho con cualquier técnica o material, con el hashtag del movimiento. En caso se ser seleccionado, el autor es reseñado en el perfil oficial @36daysoftype, una cuenta que ya supera los 72 mil seguidores.
#Caligraphymasters: Etiqueta de alto valor en el gremio de la creación de letras y trazos debido al nivel de experiencia de los trabajos que aparecen bajo este tag. Gran parte de los videos que alberga, muestran estilos gráficos hechos con materiales simples como plumas o pinceles.
#Caligraffiti: Las más de 17 mil publicaciones bajo este título demuestran el uso extendido del método caligráfico en el arte callejero, imágenes de murales ya pintados y bocetos de lettering son las publicaciones que se pueden encontrar en esta etiqueta, especialmente popular entre los grafiteros.