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Abran paso a las mamás millennials

Deciden ser madres después de los 30 años, y tienen el objetivo de ser grandes madres. Son mujeres más independientes, más preparadas y tienen en la tecnología a una gran aliada.

  • La maternidad de las millennials empieza después de los 30. Foto: Sstock
    La maternidad de las millennials empieza después de los 30. Foto: Sstock
28 de junio de 2018
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Las millennials tardan en ser mamás. Así lo señalaba, un estudio revelado en 2016 por el Urban Institute, en el que se demostraba que las tasas de natalidad entre 2007 y 2012 cayeron en Estados Unidos en, por lo menos, un 15 por ciento. ¿Las razones? Entre otras, el momento económico y la recesión que se vivió a finales de la década pasada, lo que llevó a que las mujeres entre 20 y 30 años (y sus parejas) tuvieran menos hijos. Es decir, los llamados millennials — aquellos nacidos entre 1980 y 1995, para aclarar de quiénes hablamos— han ido postergando la paternidad. Según el estudio, es una decisión de esta generación posponer la paternidad hasta alcanzar, primero, otros logros.

No significa esto que hayan dejado de tener hijos. Es decir, madres millennials, que las hay, las hay. El artículo More than a million Millennials are becoming moms each year, del Pew Research publicado en enero de 2017, señala que 1,3 millones de mujeres millennials, en Estados Unidos, dieron a luz por primera vez en 2015. Ocho de cada diez nacimientos ese año fueron de madres millennials. Por su parte, el informe “Parto 10.000”, presentado por el Hospital Manises, de Valencia, España, da pistas sobre cómo concibe la maternidad esta generación que, de tanto en tanto, es declarada la dueña del mundo. La primera conclusión del informe español, recogido por la agencia de noticias Europa Press es, en efecto, que la maternidad de las millennials empieza después de cumplida la treintena. Y que las madres, además, llegan con mayor información (el doctor Google, supongo), “altamente implicadas e informadas” sobre el propio embarazo. Señala el informe español que allí, en España, el parto natural crece moderadamente, una tendencia que aún está lejos en Colombia: desde diferentes orillas, tanto académicas como científicas, han advertido sobre la cantidad de cesáreas que se practican en el país. Mientras la Organización Mundial de la Salud indica que estas no deberían ser más del 15 por ciento, en Colombia, de cada 100 partos, alrededor de 40 son por cesárea. Ser buenas madres es su objetivo.

Ya un estudio del Pew Research Center, de 2010, indicaba que una de las preocupaciones de los millennials era ser buenos padres, incluso más que un buen matrimonio. Y se tienen confianza: según la encuesta de 2015, el 57 por ciento de ellas dice hacer un buen trabajo como madre. Sin duda son mujeres más preparadas. Han tenido un mayor acceso a la educación, lo que les da, también, una mayor experiencia laboral y un ingreso más alto. Son también, más independientes.

Si hay algo que identifica a las mamás millennial es el uso de la tecnología para acompañarlas en el proceso de crianza de sus hijos. El celular es su gran aliado, tienen aplicaciones para controlar el crecimiento del bebé, su sueño, su salud, su alimentación o, incluso, para “traducir” sus balbuceos. Las redes sociales son fundamentales, bien sea porque hacen parte de grupos donde comparten desde experiencias hasta preguntas sobre servicios y consultas médicas a otras mamás, incluso; o porque son el medio para mostrarle al mundo a sus hijos. Hay bebés con cuentas en Twitter, Facebook e Instagram, donde se comparten desde las ecografías hasta las primeras palabras de los pequeños.

Además, son madres que desafían los roles de género y las ideas preconcebidas: ¡¿rosado solo para niñas?! ¡¿Quién dijo eso?!

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