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Que la preocupación por dormir no le quite sueño

Las dinámicas de la vida moderna han generado que cada vez sean más los afectados por los trastornos del sueño.

  • Ilustración Elena ospina
    Ilustración Elena ospina
22 de enero de 2017
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En épocas de antaño, las personas se ponían en actividad antes de que saliera el sol. Las historias de los abuelos están llenas de amaneceres de trabajo duro en el campo que se hacía con la mejor energía.

Hoy algunos pretenden simular su rutina pero olvidan que los viejos se acostaban con el sol. No había electricidad y al “acostarse con las gallinas”, tenían tiempo suficiente para descansar.

La vida moderna llegó y aún mucha personas se levantan temprano, el problema, según los especialistas, es que largas jornadas laborales, compromisos sociales y el internet han hecho que se sacrifique horas de sueño.

Consultamos al médico doctorado en neurociencias y biología del comportamiento, investigador sobre trastornos del sueño de la Universidad de Antioquia, Luis Guillermo Duque, quien aparte de explicar qué son los trastornos del sueño, habló sobre sus tratamientos.

¿Cuánto se debe dormir?

“Lo que usted necesite para ser productivo al día siguiente. Para usted pueden ser suficientes 4 y para mí 8, pero en promedio se debe dormir de 6 a 8 horas como mínimo”.

El doctor explicó que el sueño está determinado genéticamente, y por eso encontramos dormidores cortos y dormidores largos y hay madrugadores y trasnochadores.

“El número de horas no es un capricho porque uno no duerme parejo toda la noche. Uno oscila entre sueños y puede despertar de 5 a 7 veces pasando de un sueño superficial a uno profundo. Cada uno tiene fases distintas con objetivos distintos”.

Trastornos del sueño

“Son las alteraciones en la calidad del sueño, o en el número eficaz de horas de sueño. Lo que significa que puedo dormir mucho tiempo ,pero tener la sensación de que no he dormido suficiente, o que no he descansado.

Estos trastornos están en el Dsm5, Manual de Clasificación y Diagnóstico Internacional de las Enfermedades, donde se contemplan 95 trastornos que pueden agruparse en cinco grandes grupos”.

1. Insomnio

“El insomnio es quizás el principal motivo de consulta de los pacientes y a su vez, se divide en tres grupos: las personas que tienen dificultades para conciliar el sueño, los que tienen dificultades para mantenerse dormidos, y los que se despiertan antes de la hora en la que deberían despertarse, un reflejo de ansiedad, sumada al hecho de dormir”.

2. Apnea de sueño

“Este trastorno está relacionado con las personas que paran de respirar mientras duermen o que tienen ronquido, generalmente más de la mitad de los mayores de 40 años ronca.

El aumento progresivo de peso en la población ha hecho que no solo haya ronquido en los mayores, sino en la población general y algunos de ellos sufre apnea del sueño.

En la apnea del sueño, los pacientes que estando dormidos se relajan y se les obstruye la vía aérea y eso los despierta. Hay apnea leve, moderada y grave. Hay quienes sufren de más de 30 apneas en una hora, y así nadie descansa, así duerma muchas horas”.

3. Parasomnia

“Es una conducta anormal asociada al sueño, por ejemplo, si usted habla dormida es somniloquía, si camina sonámbula, si usted tiene apetito y dormida se va para la cocina, se hace un sánduche y se lo come, vuelve a dormir y no se da cuenta, es un trastorno alimenticio asociado al sueño.

Las pesadillas también se suman a este trastorno. Unas son llamadas terrores nocturnos y casi siempre dan al principio de la noche. Les pasa mucho a los niños, y está relacionada con lo último que vieron en la televisión.

Otras son pesadillas del sueño profundo y es cuando las personas se despiertan aterrorizadas por fantasmas, y gritan. Hay otras pesadillas que son escasas pero peligrosas, las pesadillas vividas, y es cuando un paciente dormido profundo, se mete en el sueño y lo actúa, agrediendo a su compañera o compañero de cama, por ejemplo”.

4. Síndrome de ekbom

“También conocido como el síndrome de las piernas inquietas, y es cuando las personas tienen la necesidad de mover las piernas mientras están dormidas, o mientras están tratando de hacerlo. Este trastorno está asociado a la anemia, al embarazo, a la insuficiencia renal o a la diabetes. Pacientes con esas circunstancia de salud pueden tener más propensión a sufrirlo”.

5. Narcolepsia

“Es más escaso y a veces se confunde con la hipersomnolencia diurna. Uno puede estar hipersomnoliento si no duerme lo suficiente, pero la narcolepsia está asociada con unas hormonas que tienen que ver con la leptina. Si hay concentración de leptina el paciente puede pasar de estar despierto a dormido. En general, los episodios de narcolepsia se relacionan con situaciones que son gratas para el paciente, chistes, comida, una buena noticia”.

Lo que se debe tener presente es que cualquiera puede padecer estos trastornos porque además, somos morosos del sueño. Según el especialista, no dormir lo suficiente genera un efecto conocido como la deuda de sueño, un agotamiento físico y mental. “Las presiones sociales, laborales y de internet hacen que sacrifiquemos el sueño, además, las redes sociales se han encargado de que tengamos la idea de que no importa mucho dormir, y cada vez acumulamos más horas no dormidas”.

El costo de no dormir bien

Generalmente, no dormir bien se traduce en somnolencia durante el día, irritabilidad, aumento del riesgo de accidentes laborales, malas relaciones interpersonales y disminución de la capacidad de producción.

Dormir mal no mataría a nadie, el problema es que no hacerlo genera otras enfermedades que sí pueden causarle daños severos. “Se sabe que si usted no duerme bien y tiene diabetes, hipertensión, problemas del corazón o digestivos, esas enfermedades de base van a ser más difíciles de tratar y van a requerir mayor cuidado”.

Posibles soluciones

Para el insomnio están las ocho claves para la Higiene del sueño. Para el ronquido, lo primero es cuidar el peso. “Si a un hombre le mide el perímetro abdominal más de 120 centímetros, ese hombre va a roncar. Si el cuello a una mujer le mide más de 38 centímetros, y a un hombre más de 42, ronca, o lo va a hacer.

Con frecuencia somos roncadores posturales, lo que significa que se ronca más de para arriba que de lado, una de las soluciones es dormir de lado, de hecho existen dispositivos para obligarlos a dormir en esa posición.

La apnea, dependiendo del número, necesita una máscara que detecta las concentraciones de CO2 y tira chorros de aire para que uno no se despierte. El síndrome de las piernas inquietas está relacionado con trastornos en el metabolismo del hierro, que hay que corregir. Para la narcolepsia se trabaja la hormona de la neptina con siestas de 20 minutos cada dos horas y las parasognias, generalmente desaparecen antes de los 18 años”.

El doctor Duque aconsejó no entrar en pánico por no dormir. Tratar inicialmente de seguir las reglas de la Higiene del sueño, y en casos de alarma, consultar con un médico especializado. Pero lo más importante: no quitarle horas al sueño.

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