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Para el comandante de la Armada Nacional, almirante Roberto García Márquez, el archipiélago de San Andrés se ha convertido en un área de convergencia o plataforma para el narcotráfico, toda vez que es clave en el tránsito de la droga en su tránsito a México y E.U.
El almirante subrayó que "ninguna de las fuerzas está libre de que las redes de narcotráfico penetren a una u otra persona y en eso vivimos permanentemente haciendo una verificación". El alto oficial está convencido de que el plan de guerra Espada de Honor "está muy bien orientado y que lo que se está generando es "la irascibilidad de las Farc".
¿Cuáles son los principales retos de la Armada?
"Toda la jurisdicción de la Armada tiene diferentes retos: el Caribe, San Andrés, oriente, el sur. En el litoral Pacífico estamos haciendo un gran esfuerzo con la Fuerza de Tarea contra el Narcotráfico. Y ese litoral, por su condición de selva tropical húmeda es muy desafiante en términos de narcotráfico y de presencia de reductos de los frentes 20, 30 y el 'Daniel Aldana' de las Farc".
¿Es San Andrés un punto crítico en temas de narcos?
"San Andrés siempre ha sido un área de convergencia, porque varias de las rutas que suben hacia Centroamérica utilizan a San Andrés como una plataforma de reaprovisionamiento o de acopio de droga, para luego sacarla hacia el Golfo de México, Estados Unidos o Centroamérica. La estación de guardacostas de San Andrés es nueva completamente. La Armada tiene una unidad mayor en el área del archipiélago y están todas las unidades menores de guardacostas, que dan resultados importantes como la incautación de dólares en efectivo del lavado".
En el Pacífico se mezclan todos los problemas y actores: narcotráfico, guerrilla, bandas criminales, ¿cómo los enfrentan?
"La Fuerza Naval del Pacífico tiene un componente que todos los días da resultados. Tenemos dos brigadas de infantería de marina, el componente de guardacostas que cubre todo el litoral Pacífico y la Fuerza de Tarea contra el Narcotráfico Poseidón, que tiene diferentes componentes: inteligencia, acción integral y grupos especiales que pretenden dar una dinámica superior".
¿Por qué, pese a los esfuerzos del Estado y de la Armada, parece que se incrementa el accionar delincuencial en el Pacífico?
"Estamos convencidos de que el plan de guerra Espada de Honor está muy bien orientado. Debemos tener perseverancia. Estamos haciendo operaciones en sitios donde usualmente no teníamos contundencia ni permanencia. Eso es lo que está generando la irascibilidad de las Farc para hacer que nos vayamos a otros sitios. Ejecutan actos terroristas y afectan a la población civil en lugares de la periferia donde estamos. Buscan hacernos perder el enfoque que tenemos de estar sobre las madrigueras de las Farc, el Eln y las bandas criminales".
¿Qué hace la Armada con respecto a las pretensiones de soberanía de Nicaragua sobre el archipiélago?
"En octubre o noviembre próximo la Corte Internacional de Justicia se va a pronunciar. La Armada ha sido un elemento valioso para la Cancillería, para evaluar técnicamente la problemática. Por ejemplo, todas las cabezas de roca que están en el banco de Quitasueño han sido claves para demostrar ante la Corte que se tratan de islas y que, por consiguiente, tienen un mar territorial".
¿Cómo previene los brotes de corrupción en sus filas?
"Hay muchas iniciativas que comienzan desde la formación en las escuelas. Después, hay iniciativas tan importantes como la contrainteligencia: hoy en la Armada los cargos más sensitivos, así como en un 80 por ciento todos los oficiales y suboficiales son poligrafiados".