Santo Domingo tiene buena sazón

Uno de los pequeños descubrimientos que hizo ayer María Mercedes Uribe fue que no necesitaba cocinar por mucho tiempo las verduras. Así que hoy, cuando llegue a su casa, a pocas cuadras de la Biblioteca España del barrio Santo Domingo Savio y prepare una ensalada, esta será mucho mejor, porque la cocción no hará que se pierdan los nutrientes de los alimentos.

Ayer fue mañana de cocina en Santo Domingo Savio. Al lado de la Biblioteca España se instaló una gran carpa y se armó una cocina en la que el chef Martín López, enseñó a un grupo de amas de casa del sector no solo la forma de cocinar las verduras, también recetas prácticas, fáciles y económicas que se adaptan a su presupuesto y a sus condiciones de vida.

Este es uno de los componentes del programa Otro sabor, liderado por la Colegiatura Colombiana que busca presentar a las comunidades de los estratos 1, 2 y 3, nuevas alternativas de nutrición.

Liliana Díaz, directora de extensión académica de la Colegiatura, explica que la idea es que las señoras aprovechen los productos que pueden utilizar con facilidad, que sean los mismos ingredientes que usan normalmente para cocinar.

Por eso, además de que Martín preparó tres recetas en vivo y en directo, a las asistentes se les entregó un recetario para que las ensajen en su casa.

Ahí están bien explicadas las recetas del fríjol blanquillo con mondongo y vitoria, las lentejas con chorizo y papa, las torticas de grano, la ensalada de cidra y pastas y la sopa de ahuyama con chócolo asado.

Según Liliana, la preparación de esta última tiene un costo aproximado de 300 pesos.

La lección de cocina incluyó unos consejos para almacenar y manipular los alimentos y por supuesto, una degustación al final.

Gloria Patricia Cano, otra de las amas de casa que asistió a las clases, se siente orgullosa de sus fríjoles. Dice que en eso nadie le gana. Pero aunque sus hijos se mueren con este plato -según ella porque tienen un toque secreto que no quiso revelar- ayer estaba ansiosa por sorprenderlos con la tortilla de arepa y cebolla que le enseñó el chef. Este fue uno de los platos que más acogida tuvo entre las señoras.

Antes de la degustación, Marleny Flórez dijo que era la primera vez que tenían unas clases como estas. Ella, junto a otras mamás, no veía la hora de preparar estas nuevas y económicas delicias.