Mejorar la percepción de seguridad, seguir combatiendo, con investigación e inteligencia, las estructuras criminales y rebajar los altos índices de hurtos que se presentan en el Valle de Aburrá, son los retos que planteó el nuevo comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, brigadier general Óscar Gómez Heredia, durante la posesión ayer, en ceremonia realizada en la Plazoleta de los Pies Descalzos.
El oficial indicó que en los casos de hurto hay un incremento significativo y hay que analizar por qué esas cifras están elevadas. Pero hay que anotar que se ha aumentado la captura de los delincuentes y esto puede generar la confianza de la ciudadanía para denunciar y, además, hoy en Medellín se pueden hacer denuncias en línea.
Sin embargo, dijo, lo más importante es que la gente teme salir a la calle por el robo y por esto hay que incrementar la investigación criminal, la inteligencia y fortalecer el modelo nacional de Vigilancia por Cuadrantes, todo esto con un trabajo articulado con la Fiscalía para atacar el delito.
En la ceremonia también tomó el mando de la Regional VI de la Policía, para los departamentos de Antioquia, Chocó y Córdoba, el brigadier general Carlos Ernesto Rodríguez Cortés, quien fue comandante de la Policía Metropolitana de la ciudad de Cartagena.
Clan del Golfo
El nuevo comandante de la Región VI, expresó que el saliente jefe de esta unidad territorial de la Policía, el general Acevedo, en trabajo articulado con la Gobernación de Antioquia y las alcaldías, logró en su corta gestión la captura de 49.742 personas por diferentes delitos, y 43 de organizaciones terroristas, en especial de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional, Eln.
De igual forma, fortaleció la Operación Agamenón, que busca dar con el paradero del jefe del clan del Golfo, alias Otoniel; la captura de 612 integrantes de esa organización ilegal; la muerte de 12 de sus cabecillas, y el decomiso de 19 toneladas de cocaína.
“Este fue un gran esfuerzo de la Policía y las instituciones y por eso mi compromiso en continuar esas operaciones en una lucha frontal para lograr el objetivo, pero también con un acompañamiento constante a los policías para que no sean objeto de atentados o de temas de corrupción”, manifestó el oficial.
“El primer reto que voy a asumir es el trabajo mancomunado con nuestros líderes comunitarios, agremiaciones y con todas las autoridades municipales y departamentales, lo que es fundamental para lograr éxitos en seguridad ciudadana. En segundo lugar seguiré trabajando por la niñez para que no se contamine con drogas y no sigan malos pasos, que terminan con la muerte o con la cárcel”.
En cuanto al compromiso con el posconflicto, dijo que estará haciendo el acompañamiento a la Unidad Policial para la Edificación de la Paz, Unipec, en todos los temas de concentración de las Farc y a todas las autoridades de Antioquia, Chocó y Córdoba para que el proceso de paz lo asuman todos los policías y continúe en forma satisfactoria y en beneficio de la seguridad ciudadana.
Concluyó que la extorsión, el terrorismo y la minería criminal, serán objetivos de alto valor de su gestión y desempeño laboral y trabajará sin tregua en desarrollo del plan anticorrupción y el cumplimiento del nuevo Código Nacional de Policía, que empieza a regir el 31 de enero de 2017.
Condecoración
De igual forma, el acto fue aprovechado para condecorar con la medalla al Valor y al Mérito de la Policía Nacional, así como Honor al Mérito, de las alcaldías de Itagüí y Sabaneta, al patrullero Diego Alejandro Arroyave Henao, quien el 10 de diciembre frustró un asalto a los ocupantes de un automóvil, en la avenida Las Vegas, en Sabaneta.
Un buen ejemplo
El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, resaltó en esta ceremonia el trabajo del general Acevedo quien dedicó tiempo completo en su labor y “no solo mandaba desde un escritorio. Lo hizo desde la calle y eso fue buen ejemplo”.
El mandatario de la ciudad también le dio la bienvenida al general Óscar Gómez y le dijo que tiene un reto y “es que todos los medellinenses nos sintamos seguros y que le siga dando golpes contundentes a las organizaciones criminales y que estas sientan que los estamos atacando en serio”.
Sobre el trabajo articulado con la Policía, el alcalde Gutiérrez recordó que el 20 de julio vivieron uno de los momentos más difíciles, cuando hubo una asonada contra varios policías en el corregimiento Altavista, pero en vez de sacar la Fuerza Pública de allí, se optó por enfrentar la situación y fue así como las dos bandas que imponían el desorden, fueron capturadas.
Otro día difícil, agregó, fue cuando quemaron el 1 abril una buseta del sistema integrado al Metro, en la Loma de Los Bernal y llegaron allí cuando el carro estaba en llamas.
“No solo cayeron los que incendiaron el carro sino toda la banda conocida en Belén como la de La Bolsa”, dijo.
Recordó que a Medellín le hace falta más pie de fuerza y por esto van a llegar 100 policías de Tránsito y Transporte, que controlarán los sitios donde, por seguridad, no llegan los guardas azules de la Secretaría de Movilidad.
40 %
subió en Medellín, en 2016,
el hurto a personas, según datos hasta diciembre 10.
Regístrate al newsletter