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Con el fin de hacerlos incluyentes para los estudiantes con discapacidad, más amigables con el medio ambiente y cumplir las normas de sismorresistencia, el municipio de Itagüí iniciará la próxima semana la demolición de nueve sedes de colegios oficiales y construirá modernas estructuras.
Así lo dio a conocer el alcalde de la población, León Mario Bedoya, quien dijo que las obras serán financiadas por el Ministerio de Educación, que aportará 31 mil millones de pesos; el Área Metropolitana del Valle de Aburrá, 7.000 millones de pesos, y el Municipio, con otros 7.000 millones de pesos.
El mandatario indicó que, para no entorpecer las actividades académicas de los 15 mil estudiantes que se beneficiarán con las nuevas estructuras, se diseñaron en los plantes aulas móviles en las que ya están recibiendo las clases.
Dijo que se proyectó demoler los nueve colegios, porque son construcciones muy antiguas que no cumplen con normas de sismorresistencia y son de difícil movilización para los estudiantes con alguna discapacidad.
La renovación se realizará en los colegios La Providencia, del barrio Santa María; la escuela San José, liceo Avelino Saldarriaga, en el sector de Pilsen; María Bernal, en Calatrava; dos sedes de la Institución Educativa Ciudad Itagüí, en el sector de El Tablazo; Concejo de Itagüí, en San Francisco; Felipe Restrepo, en San Pío, y la Institución Educativa de la vereda Los Gómez.
Guillermo León Restrepo Ochoa, secretario de Educación de Itagüí, expresó que estas sedes tienen hoy jornadas en la mañana y la tarde y lo que se busca es doblar la capacidad, con el fin de que tengan jornada única y en las horas en las que no hay clases, podrán ser utilizadas por la comunidad como un eje estructurador de tejido social y para uso de los mismos estudiantes para sus actividades artísticas deportivas y trabajo social.
Anotó que estas nuevas instalaciones contarán con restaurante, cocina, biblioteca, aulas con wifi, laboratorios, rampas y en algunas habrá ascensores y eleva personas.
Itagüí tiene 24 instituciones educativas en 37 sedes y en la administración pasada ya habían intervenido 8 de estas instalaciones.
“Con estas sedes vamos a quedar con una infraestructura educativa muy moderna y vamos a tener más tiempo a los estudiantes, para garantizarles mayores aprendizajes. Desde preescolar hasta once, los alumnos prácticamente terminarán estudiando tres o cuatro años más, que es a lo que puede equivaler esta intensificación de los horarios, lo que nos ayudará a cerrar la brecha entre la educación pública y privada”, comentó.
Se calcula que a mediados de 2019 concluyan las obras.
Ricardo Caro, rector de la Institución Educativa Ciudad de Itagüí, que tiene 1.250 estudiantes entre niños y adolescentes y una jornada nocturna con 80 adultos, dijo que estas obras son muy urgentes para las tres sedes, porque aunque les habían hecho algunas mejoras, ninguna cumple con las normas de sismorresistencia.
Detalló que en la actual tienen problemas de humedades, unidades sanitarias en malas condiciones y salones oscuros y poco ventilados.
Además, agregó, la sede principal que perteneció a un colegio privado es de cuatro pisos con un inadecuado espacio para atender al público y sin accesos para personas con discapacidad.
Concluyó que para la jornada única necesitan salones con mejores condiciones para el bienestar de estudiantes y docentes.