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Rionegro le cambia la cara a su Centro
159 edificaciones que pertenecen a la zona histórica del municipio ya han recibido intervención en sus fachadas.
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El pasaje comercial La Zapatería, en el parque principal, ya pintado. -
Intervención con murales en la calle 48. FOTO Santiago Mesa
17 de abril de 2019
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Caminar por las calles del centro de Rionegro es recorrer un territorio que desde 1963 fue declarado como bien de interés cultural nacional. Sin embargo, varias de las edificaciones han sido descuidadas, por lo que el deterioro es visible e incluso, algunas de ellas hoy se encuentran en ruinas.
Ante este panorama, una alianza público-privada inició en octubre de 2018 un proceso de planeación para restaurar 80.000 metros cuadrados de fachadas (de casas, comercios o edificios), reconocidas como parte del centro histórico de Rionegro.
“El municipio ha tenido una relevancia importante en el desarrollo del país y por eso hoy estamos transformando las fachadas de cerca de 500 predios”, afirmó Miguel Ayala, director ejecutivo de la Fundación Pintuco, organización que apoya a la administración municipal en la iniciativa.
Según Ayala, en el territorio se encontraron con una condición particular, pues pocas personas eran conscientes de la necesidad de proteger el espacio público.
“Buscamos generar una nueva apropiación sobre este sitio, que el rionegrero vuelva a sentirse dueño de lo suyo”, explicó el director.
Hasta el 31 de diciembre próximo se desarrollará este proyecto denominado “Rionegro, el color de nuestra historia”. La Fundación aporta la pintura para las intervenciones, mientras que la alcaldía invierte $7.000 millones para los trabajos técnicos, sociales y arquitectónicos.
Hasta la fecha, ya se han transformado las fachadas de 159 predios, equivalentes a 10.863 metros cuadrados.
Resultados ya se ven
En el marco de la intervención a las fachadas, también se pintarán 11 murales con elementos característicos de la comunidad y el municipio.
Uno de ellos ya se puede observar en la calle Samuel Álvarez Botero (48), cerca al cementerio de Rionegro, zona que ya fue entregada a la comunidad y que refleja el resultado de los trabajos.
Cabe aclarar que antes de cada intervención, hay un equipo social que se encarga de presentar el proyecto a la comunidad. Es ahí donde cada propietario decide si quiere intervenir su fachada o no.
Incluso hay libertad para escoger los colores con los que desee pintar su casa y, quien acepte, debe firmar un acta de aprobación para que puedan iniciar los trabajos.
“Todo va a quedar muy organizado y nos tuvimos que poner de acuerdo (los comerciantes) para que así fuera. En varios de estos negocios se va a aplicar el mismo color para que sea algo representativo”, afirmó Carlos Mario Monsalve Agudelo, dueño de la floristería J.C., que estaba siendo intervenida por el personal técnico del proyecto al momento del recorrido.
Monsalve Agudelo tiene su negocio ubicado en la calle 48 con carrera 51 (cerca al parque principal) desde hace 18 años. El comerciante expresa que es la primera vez que se realiza una intervención de este tipo en la zona y se muestra ansioso por ver los resultados.
Una visión parecida tiene Irma Sáenz, trabajadora del local Marcas & Modas, ubicado en el pasaje comercial La Zapatería, del parque principal, que también fue renovado.
Allí se adelantan trabajos de uniformidad en los avisos de los comercios para que todos sean de color dorado.
“El pasaje quedó muy bonito, antes estaba un poco caído y nadie se preocupaba por reformarlo. Hace más de 20 años que estamos acá y los mismos clientes han resaltado el cambio”, agregó Sáenz.
Trabajo continuo
El proyecto también contempla restauraciones menores dependiendo del predio, cambiando elementos como puertas y ventanas de los inmuebles que lo ameriten.
Al principio, según la Fundación, hubo un trabajo arquitectónico muy intenso ya que a cada inmueble se le hizo una ficha técnica para identificar qué tipo de arquitectura tiene y cómo sería su intervención, que es ejecutada por un equipo técnico de 35 personas.
El de Rionegro es uno de los 44 centros históricos declarados en el país por el Ministerio de Cultura. Además, el municipio cuenta con 17 Bienes de Interés Cultural (BIC).
Implicaciones urbanísticas
Poseer esta clasificación cultural representa poco margen constructivo para los propietarios, que han pasado por encima de la ley patrimonial para modificar sus inmuebles o levantar estructuras en sus casas, a pesar de las restricciones en altura para las edificaciones.
Andrés Julián Rendón, alcalde de Rionegro, sostiene que haber sido declarado como centro histórico de Colombia es un privilegio del cual el municipio nunca ha sido consciente, “y así como se le había dado la espalda por tantos años al río en cuyo honor lleva su nombre, también le había dado la espalda a esta oportunidad”, dijo.
El alcalde afirma que, a pesar de que Rionegro no tenga mucha posibilidad de ejecutar grandes desarrollos constructivos en su centro, esto es una oportunidad de negocio y de fomento al turismo para el fortalecimiento de la economía local.
“Rionegro ha sido un desastre en el tema de la planeación. Este municipio no supo cuidar ese acervo patrimonial y ha crecido de forma muy desordenada”, explicó.
A pesar de que la localidad cuenta con una extensión total de 19.600 hectáreas, Rendón lamenta que históricamente se tardara casi cinco siglos en consolidar un casco urbano de 800 hectáreas.
Asimismo, dice, aún hay 140 hectáreas despojadas, es decir, “lotes vacíos que podrían haber sido adquiridos por el Municipio para fortalecer el equipamiento público y tener más zonas verdes”.
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galones de pintura ya se han aplicado en las fachadas de los 159 predios terminados.
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