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Mientras en el Oriente antioqueño era recuperado ayer el cadáver de otro hincha del DIM desaparecido el pasado lunes, las autoridades continuaban con la investigación sobre la pelea del entre integrantes de barras bravas, que concluyó con la muerte de tres jóvenes.
Los bomberos de El Santuario encontraron, la tarde de ayer, el cuerpo de Juan Diego Ramírez, que estaba desaparecido luego de una pelea que se registró con aficionados del Atlético Nacional en dicho municipio.
El cadáver fue recuperado por los rescatistas en las aguas de la quebrada La Marinilla y remitido a Medicina Legal para la necropsia y establecer las causas de su muerte.
Los hechos se presentaron el pasado lunes en la vía Medellín-Bogotá, donde según versiones de las autoridades, algunos hinchas de Atlético Nacional, provenientes de Bogotá, desencadenaron una riña en contra de aficionados del DIM que viajaban en una tractomula con destino a Bucaramanga.
Según las primeras indagaciones, los seguidores del equipo rojo viajaban la mañana de ese día con destino a Santander, para asistir al encuentro que el DIM jugaría en la tarde con el Atlético Bucaramanga en el estadio Alfonso López.
De acuerdo al testimonio de uno de los hinchas que viajaba con las víctimas y que logró salvarse, el camión en el que se transportaban fue interceptada por un grupo de aficionados de Atlético Nacional con los que se generó un enfrentamiento.
Además de Ramírez, los otros muchachos fallecidos fueron identificados como Brayan Eduardo García y Juan Pablo Marín.
El pasado jueves los líderes de ambas hinchadas se comprometieron a cooperar en las diligencias investigativas y a continuar su trabajo por la convivencia en el fútbol.
Además, rechazaron los enfrentamientos en los que estos tres jóvenes perdieron la vida.
Inicialmente, las autoridades reportaron que los cadáveres de García y Marín no presentaban heridas con armas de fuego o blancas, pero algunos de sus compañeros aseguran que les notaron sangre.