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Aunque no es una norma, el colegio Jorge Robledo, ubicado en el occidente de Medellín, decidió suspender la venta de gaseosas y bebidas azucaradas no naturales en la cafetería de la institución, con el objetivo de contribuir con la salud de los niños y jóvenes.
Así lo dio a conocer Federico Guillermo García, rector de la institución. “Encontramos que en una bebida azucarada hay 14 cucharadas de azúcar, por esto preferimos ofrecer jugos naturales”.
García aceptó que las gaseosas generan márgenes de ganancia más altos, pero “preferimos ganar en términos de salud de los muchachos”.
Para el rector del Jorge Robledo, el momento de la alimentación debe ser un espacio formativo y no un negocio.
Por esto, no solo eliminaron el azúcar de las bebidas, sino también las barreras físicas en la cafetería, “porque los estudiantes deben respetar la fila”.
Por su parte, la Secretaría de Salud de Medellín afirmó ver con “agrado y satisfacción” la iniciativa tomada voluntariamente por la institución educativa, “que busca promover estilos de vida saludables y disminuir el consumo de alimentos que no son sanos para los niños”.
Angela María Londoño Trujillo, directora técnica y de planeación de la Secretaría de Salud de la capital antioqueña, explicó que, actualmente, en alianza con la Fundación Bloomberg, realizan acciones de prevención y promoción de espacios educativos saludables, en los cuales se promueve el consumo de alimentos que contribuyan a una adecuada condición nutricional y al desarrollo de hábitos de vida saludables entre los estudiantes.
“Promovemos el consumo de frutas, jugos naturales, alimentos bajos en grasa, sal y azúcares e invitamos a las instituciones educativas a que, de forma voluntaria, se involucren en el proyecto”, dijo la funcionaria.
En el territorio nacional tampoco existe una ley que dé orientación frente al tema, manifestaron en la Secretaría de Salud, sin embargo, la directora técnica y de planeación de la entidad afirmó que “sería positivo que existieran leyes que orienten la alimentación escolar y ofrezcan herramientas para implementar las estrategias”.
Para determinar el estado actual, en 2019, la Secretaría de Salud y la Fundación Bloomberg entregarán un diagnóstico de la alimentación escolar en 42 instituciones públicas de la ciudad.
También comenzarán con el desarrollo de una política pública con el fin de evitar enfermedades a futuro por mala alimentación.