Hace pocos días lo ví, expuesto en la vitrina del concesionario de la marca, como si fuera un modelo nuevo. Se veía tan moderno como uno de los nuevos productos de Citroën. A sus 56 años no acusaba el paso del tiempo y aun sus líneas futuristas refulgían como aquella noche de 1955, cuando iluminó a la ciudad luz en el salón de París, después de 18 años de desarrollo, generando 12.000 pedidos en 24 horas. Sí, un DS de 1956 (según su matrícula), que ignoraba que existía en Medellín, me esperaba para una sesión de fotos y una breve y arbitraria reseña de su historia.
Cada vez que BMW anuncia una renovación de su Serie 3, la expectativa entre clientes, aficionados, competidores y periodistas del mundo del motor desborda cualquier cálculo. Es la más exitosa línea de la marca y desde hace ya décadas, el modelo premium más vendido en el mundo (mas de 12 millones de unidades en 38 años). Por eso, cada carrocería que sale con este rótulo genera un morbo especial, como acaba de suceder con la denominación F30, la sexta generación de este modelo que data ya de 1975 y que nos ha dejado un sabor especial de boca por unas características puntuales que les vamos a contar a lo largo de este relato. Bienvenidos al que es, tal vez, el mejor serie 3 de la historia.
No paramos de sorprendernos con las joyas que a veces se encuentran en el parque automotor colombiano. El turno esta vez es para un rarísimo Lotus Esprit, ejemplar que de por sí ya es exótico en el país, pues esta marca nunca tuvo representación oficial en Colombia. Pero si además damos una vuelta de tuerca diciendo que esta es una edición especial llamada JPS y de la que solo se fabricaron 147 unidades, estamos ante una rareza digna de resaltar.
Ya poco a poco se vuelve paisaje escribir sobre los avistamientos exóticos que se ven en Colombia. Hemos hablado en estas páginas de Rolls-Royce, Bentley, Lamborghini, Aston Matin y Ferrari, marcas que jamás pensamos ver rodar con sus más recientes exponentes por las calles colombianas y que ahora, gracias a un buen clima político y económico, ya pueden salir a la calle con menos prejuicios, eso nos alegra como amantes de los autos que somos. Pero nuestra capacidad de sorpresa aun tiene espacio para el asombro con piezas como la que a continuación les mostramos, un genuino Ferrari 599 GTO, la más rabiosa máquina que se produce hoy en día en Maranello.
Se llevó a cabo el XXIII Encuentro Nacional de Clubes de Autos Clásicos y Antíguos en el Hotel Las Lomas de Rionegro. Aunque la participación no fue tan nutrida debido a los problemas de nuestras carreteras por la temporada de lluvias, hubo piezas muy interesantes para resaltar, como se las mostramos a continuación en Blogaraje.
“Soy la suma de 125 años de experiencia. Aquí me ves, materializando el sueño de mi padre. Soy su hijo muy amado”. Algo insolente de entrada, un Mercedes-Benz SLS AMG en plata alubeam llegó en su gira a Medellín, buscando un garaje a la altura de su abolengo. Mientras lo encuentra, bueno es que converse un rato con este Blogaraje.
El chisme me lo había contado un amigo hace unas semanas. Que había llegado un flamante Rolls-Royce Ghost a Medellín y que él lo había visto con sus propios ojitos. Es más, me dijo que había hablado con el feliz propietario de semajante montura. La primera reacción obviamente es de incredulidad y de sospecha. “¿No te habrás confundido?”, “¿Estas seguro que era un Rolls?”. Pero dada la credibilidad que le tengo por su enorme conocimiento del tema, eché a rodar la bola hasta que recientemente se publicaron las fotos que acompañan esta entrada, en el foro Street Tuning (www.stcolombia.com) para comprobar que sí señoras y señores, un RR Ghost ya está en Colombia.
Qué regocijo no haber perdido aun la capacidad de asombro con las joyas automotrices que pueden estar rodando por nuestro país. Recientemente mi amigo y colega Daniel Otero me mostró unas fotos que captó en el evento Retromotor que se desarrolló hace algunos días en el autódromo de Tocancipá y allí aparece reluciente una auténtica rareza en cualquier parte del mundo. Nada menos que un Bentley Speed Six, Le Mans edition, de 1928, un auto de carreras genuino, construído en su época para batir a todos sus rivales en las pistas más prestigiosas del mundo y del que solo se construyeron 182 unidades entre 1928 y 1930. Hoy, uno de estos incunables es venerado en un garaje bogotano.
Llegó al país el superdeportivo más premiado de los últimos tiempos y un auténtico roba-miradas donde quiera que va. Además no vino solo, sino con un colega. Se trata de dos unidades del Ferrari 458 Italia, que a menos de un año de ser lanzado mundialmente, acaban de entrar al país en su característico tono rosso corsa (las cintas blancas removibles son de protección).
Solo con escribir el título de este post, ya se nos ponen los pelos de punta. Si, señores, todo un Lambo Gallardo y en su más costosa versión, la Spyder, se encuentra guardado en algún lugar de Bogotá que aun no logramos identificar, a la espera seguramente de sus placas amarillas para salir a “soportar” el asfalto capitalino. Las fotos nos llegaron vía Facebook. !Loor y prez a la seguridad democrática y la confianza inversionista en el país!.