La historia a continuación ilustra una posición bien interesante desde la inteligencia emocional, al final les añado algo relacionado que trabajo con mis clientes.
Cuenta que un columnista acompaño a un amigo a comprar un periódico. Su amigo al llegar al quiosco saludo amablemente al vendedor, que le respondió de forma muy grosera, hasta le lanzó el periódico de mala manera. Aun con la reacción del vendedor su amigo sonrió y le deseó un buen resto de día.
Al retirarse el columnista le pregunto a su amigo…
¿Ese hombre siempre te trata así?
Si, a veces es peor, hoy estuvo mas amable que de costumbre. Responde el amigo.
¿y tu siempre eres tan amable y educado con el?
Si claro… responde de nuevo el amigo.
¿Y me quieres decir por qué lo haces cuando el es tan antipático hacia ti?
Simple… yo tengo clara mi mente y elijo como quiero tratar a los demás, no quiero que el sea quien decida como me he de comportar…
Me han preguntado muchísimas veces que hacer para controlar las reacciones automáticas negativas, y me dicen “Es que exploto con cualquier cosa y quiero aprender a controlarme” mi respuesta es simple…. ese es el error… hay que hacer cambios profundos y reprogramar el cerebro emocional a través del cerebro consciente para que reaccionar bien sea un habito, si vuelven a leer la historia se darán cuenta que la persona agredida por el vendedor tiene muy claro quien es, como comportarse, sabe como quiere tratar a los demás y no le presta atención al ataque, en resumen “El problema es del vendedor” y el día de la persona inteligente emocionalmente continua bien, su estructura mental le permite hacer caso omiso de la reacción equivocada de las personas problemáticas, no tuvo que controlar nada, su reacción natural fue de continuar su camino como si nada hubiese sucedido.
Piensen en una persona reactiva que con cualquier cosa reacciona de mala manera y entra en conflicto hasta por una mala mirada, se le daña el día o como mínimo queda agotado mentalmente por el esfuerzo de controlar las emociones negativas, siempre lo he dicho, es mejor construir un sistema de emociones adecuadas y entrenarse cada día para ser mucho mas calmado, mas tranquilo y vivir en paz consigo mismo, dado el poder que tiene el cerebro emocional sobre nuestra vida.
Mi trabajo en empresas y conversaciones con otros colegas me ha mostrado que es mejor tener emociones sanas a tener que controlar un montón de emociones negativas que pueden salir en cualquier momento sin darnos cuenta y nos pueden traer serios problemas si se manifiestan.
Los invito a que estén mejor consigo mismos y con otros… vale la pena.
Hasta la próxima, un saludo para todos y seguimos en contacto permanente.
Mercadólogo – Profesional en coaching y neurociencia aplicada
Certificación internacional Asociación Española de Coaching (ASESCO)
Correo: dsancheg@gmail.com
Hola Daniel
Gracias por compartir tus conocimientos, excelente artículo.
Dani, muchas gracias!! me encantó este artículo …
Excelente artículo, supongo que para llegar a ese nivel de paz interior hay que trabajar mucho el cerebro y la mente.