Cada día sorprenden más: hay peces que pueden reconocer los rostros humanos, una capacidad que no se les conocía.
Eso es lo que sugiere un estudio publicado en Scientific Reports, realizado por científicos de las Universidades de Oxford y Queensland, que estudiaron un pez tropical, el arquero.
“Ser capaz de distinguir entre un gran número de rostros humanos es una tarea difícil, sobre todo por el hecho de que las caras comparten los mismos rasgos básicos. Todas tienen dos ojos sobre la nariz y boca, de modo que para distinguir las personas se deben identificar diferencias pequeñas en sus rasgos”, expresó Cait Newport, primer autor.
Se dice, agregó, que es tan difícil la tarea que solo la logran primates, que tienen un cerebro grande y complejo. Es más, los humanos tenemos un área especializada del cerebro para reconocer rostros, lo que habla de esa complejidad.
Por eso se quería saber si otro animal con un cerebro más simple y pequeño sin necesidad evolutiva de reconocer las caras humanas, eran capaces de hacerlo.
Se encontró que el pez, que carece de una corteza visual sofisticada como la de los primates, son sin embargo capaces de discriminar 1 rostro de 44 nuevos. Una capacidad de discriminación visual impresionante.
En el estudio, al pez tropical arquero, conocido por su capacidad de expeler unos chorros de agua para cazar presas aéreas, se les mostraron dos imágenes de rostros humanos y se les entrenó para a elegir una emitiendo los chorros. Luego se le presentaba ese rostro con uno siempre distinto y escogían el que habían aprendido a reconocer y lo hicieron aunque de las fotos se eliminaron detalles como forma de la cabeza y color.
El pez fue muy preciso al seleccionar la cara correcta, con un desempeño del 81 % en el primer experimento (escoger el rostro entre 44) y 86 % en el segundo (con los rasgos faciales como brillo y color modificados).
Un cerebro menos complejo que tareas complicadas. ¿Cómo?
¿Pueden estar el éxito en los negocios y en la vida profesional ligados a los genes?
La respuesta, para un estudio aparecido en Psychological Science es… ¡sí!
De acuerdo con la investigación, que se basó en el seguimiento de 1.000 personas durante 4 décadas, algunas características psicológicas vinculan los genes con la movilidad social hacia arriba. Según eso, varios factores psicológicos desempeñan un rol en vincular el perfil genético con varios resultados importantes en la vida, como el logro profesional, la seguridad financiera, la movilidad geográfica y la movilidad social hacia arriba.
El estudio de Daniel W. Belsky de Duke University School of Medicine, se apoyó en estudios previos que muestran un continuo genético que predice el logro educativo de una persona.
En este, se examinaron millones de variantes genéticas de más de 100.000 personas para hallar que esas variantes podían ser reunidas en un marcador poligenético que se relacionaba con el logro educativo. Aquellos con un marcador sobre 0 eran más dados a completar más años de educación.
En el nuevo estudio se encontró que los vínculos genéticos con el resultado educativo también predecían logros más allá.
Se halló que era más probable que aquellos con más altos marcadores poligenéticos dejaran su hogar en busca de oportunidades profesionales, construían carreras más exitosas, manejaban mejor el dinero y tenían parejas con niveles de educación e ingresos más altos.
También se encontró que esos marcadores más altos se asociaban con la movilidad social, los niños con marcadores poligenéticos mayores tendrían a tener más éxito socioeconómico así provinieran de familias relativamente pobres.
No se encontró una relación entre esos marcadores altos y la salud física.
Pero en general los investigadores advirtieron que el aporte genético al éxito personal es de todas maneras pequeño.
La recompensa de las redes sociales: un estudio publicado en Psychological Science encontró que los mismos circuitos cerebrales activados al comer chocolate o al ganar dinero, se activan en los adolescentes cuando ven gran cantidad de ‘likes’ en sus fotos o en las fotos de sus amigos en una red social.
Un estudio que se hizo mediante escaneo cerebral d ellos muchachos.
A los 32 adolescentes de 13 a 18 años se les pidió participar en una pequeña red social tipo instagram. Luego les mostraron 148 fotografías en un computador durante 12 minutos, incluyendo 40 que cada uno había entregado, y se analizó su actividad cerebral mediante imágenes de resonancia magnética funcional.
Cada foto mostraba también el número de ‘likes’ que supuestamente había recibido de otros participantes, pero en verdad fue asignado por los investigadores.
“Cuando veían sus propias fotos con un gran número de ‘likes’, observamos actividad en varias regiones cerebrales”, dijo Lauren Sherman, investigadora del Centro de Medios Digitales de Niños de la Universidad de California en Los Ángeles.
Una regio´n muy activa fue una parte del estriado llamada núcleo accumbens, integrante del circuito de recompensas del cerebro. Se cree que este es muy sensible durante la adolescencia.
También se observó con los ‘likes’ activación de regiones conocidas como las regiones sociales y otras relacionadas con la atención visual.
Para decidir si dar clic en una foto que les gustaba, los adolescentes eran muy influenciados por el número de otros likes que tenía la imagen.
Los adolescentes vieron fotos neutras, como de alimentos y amigos, y otras riesgosas, como de cigarrillos, alcohol y adolescentes con ropas provocativas. Para los 3 tipos, incluyendo las propias, era más probable que les dieran like si tenían ya otros likes.
Cuando miraban las riesgosas en comparación con las neutras, mostraban menos activación de áreas asociadas con el control cognitivo y la inhibición, incluyendo la corteza cingulada dorsal anterior, las cortezas prefrontales bilaterales y las cortezas laterales parietales, que son regiones relacionadas con la toma de decisiones y que pueden inhibirnos de participar en ciertas actividades o nos dan luz verde para seguir.
Ver fotos que implican una conducta riesgosa parece reducir la actividad en las regiones que ponen freno, debilitando tal vez el filtro ‘tenga cuidado’ en los adolescentes.
Científicos probaron en la naturaleza un caso de aposematismo: las mariposas nocturnas tigre, fuente alimenticia de los murciélagos, envían señales acústicas a estos para advertirles que no son nada sabrosas. Ese mecanismo es usado por distintas especies pero de manera visual, como tener un color más vivo. Pero como los murciélagos no ven bien, estos insectos desarrollaron una manera de defenderse mediante el sonido. El hallazgo fue publicado en Plos One.
2. Tierra oxigenada
Aunque se ha sostenido que al principio la Tierra no tenía oxígeno, un hallazgo en micrometeoritos de hace 2.700 millones de años sugiere que la oxigenación llegó antes de lo creído, en las mismas cantidades que hoy. El artículo apareció en Nature. Estaba presente en la atmósfera superior, separada por una neblina de metano de la capa baja de la atmósfera que no contenía el gas.
3. Conductores trabados
Un estudio de una fundación para la seguridad del tráfico encontró que en el estado de Washignton, Estados Unidos, donde se legalizó la marihuana, los accidentes de autos con conductores ‘elevados’ se duplicó, lo que plantea algunas dudas sobre la autorización para conducir bajo los efectos de la hierba en momentos en que crece la presión para permitir su uso en varias regiones.
4. Genética educativa
Un estudio publicado en Nature encontró que existen 74 puntos del genoma relacionados con el rendimiento escolar y si bien su incidencia en conjunto no es demasiado alta, sí es clara. Estudios precios decían que cerca del 20% del resultado escolar se debía a al genética. Ahora se encuentran sitios específicos, pero se cree que falta mucho por conocer sobre el tema.
5. Hacha antediluviana
En Australia, en la remota región de Kimberley, arqueólogos encontraron la que parece ser el hacha más antigua que data de la Edad de Piedra, hace 45.000 a 49.000 años, muy cerca al momento en que los humanos llegaron a esas tierras. El fragmento había sido desenterrado a comienzos de los 90, pero el análisis permitió saber ahora que estaba en un estrato de mucha más antigüedad. El hacha fue una innovación para esos primeros pobladores australianos. El hallazgo apareció en Australian Archaeology.
6. Más y más y más
De un solo golpe, astrónomos anunciaron la confirmación de 1.284 planetas extrasolares, con lo que asciende a 3.409 el número de esos mundos detectados hasta ahora, con cientos de candidatos en espera de confirmación. El hallazgo se logró gracias al telescopio espacial Kepler de la Nasa, dedicado a buscar planetas en otras estrellas.
7. Medicina insensible
Cuando las personas consumen acetaminofén para reducir su dolor, sienten menos compasión por el dolor físico y emocional de los demás sugiere un estudio publicado en Social Cognitive and Affective Neuroscience. Una especie de analgésico social. Ese compuesto es empleado en más de 600 medicinas de uso común. Otro estudio ya había mostrado que ese compuesto bloquea las emociones positivas.
8. Promesa malárica
Un candidato a vacuna contra la malaria brindó protección a adultos voluntarios sometidos al Plasmodium falcíparum, protección durante más de un año en el ensayo en fase 1 reveló un estudio en Nature Medicine, lo que convierte al compuesto denominado PfSPZ en una opción seria que continuará evaluándose en otras fases. La malaria mata cerca de 500.000 personas cada año en regiones tropicales inoculada por mosquitos Anopheles.
9. No envuelva los bebés
El riesgo de muerte súbita en los bebés parece tener un incremento cuando son acostados envueltos en cobertores, sea que duerman de lado o sobre su estómago dice el estudio aparecido en Pediatrics. La investigación analizó casos de muerte súbita en distintas regiones encontrándose un aumento en los bebés envueltos, siendo mayor en aquellos que eran acostados de lado.
10. Cuidado si tiene hambre
Un estudio aparecido en Neuropsychopharmacology encontró que cuando las personas tienen mayores niveles de grelina, hormona asociada al hambre, son más impulsivas y no toman las mejores decisiones. La investigación se hizo con ratas y abre las puertas a nuevos tratamientos de problemas psiquiátricos asociados a la impulsividad.
Nunca tome decisiones mientras esté… hambriento. Eso al menos es lo que sugiere un estudio que relaciona la grelina (hormona del hambre cuestionada últimamente) con un efecto negativo tanto en la toma de decisiones como en el control de los impulsos.
El estudio publicado en Neuropsychopharmacology fue hecho con ratas en la Universidad de Gotemburgo. Esta hormona es producida en el estómago cuando se tiene hambre.
“Demostramos que los niveles altos de grelina vistos antes de comer o durante los ayunos, hacen que el cerebro actúe impulsivamente y afecte la capacidad de tomar decisiones racionales”, explicó Karolina Skibicka, docente en la Academia Sahlgrenska en esa universidad.
La impulsividad es compleja pero se puede descomponer en la acción impulsiva, esa incapacidad de resistir una respuesta motriz, y la elección impulsiva, la incapacidad de posponer una gratificación.
Muchos han experimentado la dificultad de resistirse a un sánduche o algún alimento más aún si saben que pronto se servirá el almuerzo y lo mismo aconteció con las ratas en el estudio.
Los científicos encontraron entre otras, que a las ratas que les daban grelina directamente en el cerebro, que imita cómo el estómago nos comunica la necesidad de comer, eran más datos a buscar a presionar un dispositivo para tener una recompensa en vez de esperar a pesar de que la perderían.
La capacidad de posponer gratificación para obtener una mayor después es una medida de elección impulsiva, por ejemplo elegir una galleta ya o varias unos minutos después, o comer un alimento calórico ya y no esperar la opción de uno más sano.
La persona que elige la gratificación inmediata a pesar de que esperar le traerá una mejor, se caracteriza por ser más impulsiva y eso implica una capacidad más pobre para tomar decisiones racionales.
Los altos niveles de la hormona evitaron que las ratas fueran capaces de esperar una recompensa mayor.
El estudio también mostró que los niveles aumentados de grelina causaban cambios genéticos en circuitos cerebrales relacionados con la impulsividad y la toma de decisiones.
Como la impulsividad es un rasgo de varias enfermedades neurosiquiátricas el hallazgo podría conducir a tratamientos enfocados en los receptores de grelina en el cerebro según los investigadores.
Científicos presentaron en Environmental Science & Technology análisis del aire que respiran los ciclistas en sus recorridos, encontrando que en zonas congestionadas los compuestos orgánicos volátiles eran 100 a 200 veces más altos y ellos absorbían 40 a 100% más en esos sitios, lo que sugiere la importancia de rodar lejos del tráfico pesado. Un alto precio por contribuir a descontaminar las ciudades. Muchos de esos compuestos son cancerígenos.
2. Qué cosa tan enorme
Astrónomos pudieron medir con precisión el agujero negro supermasivo en el centro de la galaxia NGC 1332 a 73 millones de años luz de nosotros: es unos 660 millones de veces más masivo que el Sol y una nube de gas lo rodea a una velocidad de 1,8 millones de kilómetros por hora. La medición se logró con la red Alma en Chile y fue publicada en Astrophysical Journal Letters.
3. ¿Hongo esquizofrénico?
Un novedoso estudio de científicos de la John Hopkins vinculó la esquizofrenia con un mayor número de infecciones por el hongo Candida y el desorden bipolar. Personas con esos desórdenes era más probable que hubieran tenido infecciones repetidas por el hongo según el estudio en npj Schizophrenia, aunque los autores indicaron que no se puede hablar aún de causa-efecto pero el hallazgo sí permite un examen al rol de los estilos de vida, sistema inmunológico debilitado y las conexiones microbios-cerebro como contribuyentes a un mayor riesgo de esos problemas mentales.
4. Tres planetas y una enana
En torno a una estrella enana a solo 40 años luz, astrónomos detectaron 3 planetas con tamaño parecido al de la Tierra y aunque 2 de ellos residen muy cerca a la estrella, que esta sea mucho menos caliente que el Sol abriría las posibilidades de que estuvieran en zona habitable. Del tercer cuerpo no se pudo establecer la órbita. Estas estrellas son un buen objetivo en busca de otras Tierras porque constituyen 15% de las estrellas cercanas a nosotros. El logro fue publicado en Nature.
5. La onda de choque
Astrónomo detectó la segunda onda de choque producida en la fusión de cúmulos de galaxias, que se desplaza a 2.700 kilómetros por segundo. El hallazgo revelado en The Astrophysical Journal ayuda a entender más la evolución de esos objetos a tan gran escala y a estudiar fenómenos de alta energía en el medio intergrupal. La detección se hizo en el cúmulo Abell 655.
6. Robot cirujano
En otro avance en cirugía robotizada, científicos lograron una operación de tejido blando en cerdo vivo mediante un robot, sin uso de las manos humanas, logrando alto nivel de precisión según un artículo aparecido en Science Translational Medicine. Este tipo de tejidos requiere suma destreza por las situaciones inesperadas que pueden ocurrir durante la intervención. Los robots han ganado presencia como asistentes, no como cirujanos directamente, por lo cual este logro tiene más relevancia.
7. El noveno, en entredicho
A comienzos de año hubo revuelo por la publicación de un estudio que sugería la existencia del planeta 9 en nuestro Sistema Solar. Ahora otro grupo de astrónomos publicaron en Astrophysical Journal Letters el análisis de varias de los escenarios para la existencia de ese planeta y concluyeron que son muy bajas, lo que atiza la hoguera de quienes siguen en la búsqueda de ese esquivo y hasta ahora inexistente cuerpo.
8. El perro comelón
Quienes tienen perros labradores retrievers saben de su avidez por la comida y su tendencia a la obesidad. Un estudio en Cell Metabolism vincula ese comportamiento a una mutación en el gen POMC. En los perros más obesos había un enredo en la sección final del gen, lo que hace que no tengan la capacidad de sentirse llenos luego de una comida.
9. Somos más
Un nuevo estudio sobre el tema sugiere que el planeta podría albergar un billón de especies, d ellas cuales apenas se han encontrado menos de 3 millones. El estudio en Proceedings of the National Academy of Sciences se basa en nuevos modelos que consideran la altísima cantidad de microbios que deben existir. Hasta ahora las investigaciones sobre la biodiversidad de la Tierra arrojan resultados muy diferentes.
10. Más carne al banquillo
Para rematar los estudios de la Organización Mundial de la Salud que vinculó el año pasado el consumo de carne con mayor riesgo de cáncer, una publicación en el Journal of the American Osteopathic Association, mostró que en un estudio con 1,5 millones de personas se encontró que la mortalidad por todo tipo de causas es más alta en quienes consumían carne, en particular la roja y la procesada.
Cuervo mirando la cámara. Foto cortesía Helena Osvath
A cerebro más grande, mayor inteligencia ha dicho la ciencia, pero los cuervos crean una ruptura con esa afirmación ampliamente sostenida.
Sí, un estudio reveló que estas pequeñas aves, de cerebro pequeño, son tan listas como los chimpancés y otros grandes simios.
De su capacidad para resolver problemas la literatura científica se ha nutrido en los últimos años. Y en la última investigación de científicos de Lund University en Suecia se comprueba que son tan inteligentes como esos primates pese a sus cerebros mucho más pequeños, algo que sugiere que antes que el tamaño del cerebro, es la densidad de neuronas y la estr5uctura cerebral la que juega un rol esencial en términos de inteligencia.
“El tamaño cerebral absoluto no es toda la historia. Hallamos que los córvidos se desempañan también como los grandes simios pese a tener cerebro más pequeño”, comentó Can Kabadayi, estudiante de doctorado en Ciencias Cognitivas.
Medir la inteligencia no es sencillo. Una de sus claves está en el control inhibitorio y la capacidad de contener los impulsos animales para elegir un comportamiento más racional.
Científicos en Duke University hicieron un estudio en 2014 al comparar el control inhibitorio de 36 especies animales, sobre todo grandes simios y micos. Usaron el test del cilindro, en el que se pone alimento en un tubo transparente con aperturas a ambos lados. El reto para el animal es obtener la comida usando los orificios en vez de cogerla de manera directa.
Para tener éxito el animal debe mostrar control y elegir la estrategia más eficiente.
El estudio a gran escala concluyó que los grandes simios se desempeñan mejor y que el tamaño del cerebro era clave en la inteligencia.
Así, Can Kabadayi, con científicos de la Universidad de Oxford y el Max Planck Institute for Ornithology en Alemania, hicieron el test con cuervos, cuervos de Nueva Caledonia y grajillas para conocer su control inhibitorio.
Primero entrenaron las aves para obtener una recompensa de un tubo opaco con un agujero en cada extremo. Luego repitieron el experimento con uno transparente. El impulso natural sería ir directo al alimento, pero los cuervos elegían ingresar por los extremos. Los logros fueron casi del 100 %, comparable al desempeño de bonobos y gorilas.
“Eso muestra que los cerebros de estas aves son muy eficientes a pesar de un tamaño absoluto más pequeño. Como lo indicó el estudio, podría haber otros factores aparte del tamaño que son importantes para la inteligencia, como la densidad neuronal”, dijo Can Kabadayi.
“Aún hay mucho por entender y aprender sobre la relación entre inteligencia y tamaño cerebral, así como de la estructura del cerebro de las aves, pero este estudio muestra que los cerebros de las aves no son solo cerebros de aves después de todo”.
El estudio apareció en Royal Society Open Science.
Burbuja dejada por explosiones estelares en la Gran Nube de Magallanes. Foto Telescopio Gemini del Sur
1. Visitantes de la lejanía
La mayoría de los rayos cósmicos que están llegando a la Tierra provienen de cercanos cúmulos estelares de estrellas masivas según mediciones durante 17 años de un espectrómetro de Nasa en el espacio. Ha detectado cerca de 300.000 rayos cósmicos de núcleos de hierro ordinario y solo 15 del hierro radiactivo 60Fe: este es que proviene de una explosión de supernova, que debió ocurrir hace pocos millones de años. Entre los grupos que han estado ‘enviándonos’ rayos figuran Upper Scorpius y Lower Centaurus. El estudio apareció en Science.
2. El bebé
Quién creyera: un bebé con 3,4 kilos al nacer. ¿Mucho? Bueno eso tenían posiblemente los titanosaurios R. krausel cuando eclosionaban. De adultos medían 15 metros más o menos. Científicos analizaron los restos de un individuo que murió entre 39 y 77 días tras su nacimiento, tal vez de… hambre. En ese momento pesaba 40 kilos y medía 35 centímetros hasta la cadera. El estudio fue publicado en Science.
3. Dibujo, luego recuerdo
Al hacer dibujos de la información que se necesita recordar se refuerza la memoria y es mucho más fácil recordar después. En el artículo publicado en The Quarterly Journal of Experimental Psychology se analizaron varios métodos de recordación y hacer dibujos fue el que mejor funcionó, tal vez porque ayuda a formar una memoria más cohesionada que integra información visual, motriz y semántica.
4. Bacterias en acción
La conjunción de ciertas bacterias en el intestino produce sustancias que afectan el contenido de mielina en las neuronas lo que hace los ratones proclives a evitar el contacto social según el estudio publicado en eLife. Esas sustancias pasan la barrera del cerebro y reducen la mielina, que ha sido asociada a enfermedades como al esclerosis múltiple y a problemas psiquiátricos como la depresión.
5. Ciudades microbio
Cada ciudad tiene sus propias comunidades de microbios, diferentes a otras urbes, de acuerdo con un estudio en mSystems, comunidades que no varían mucho entre las oficinas situadas en la ciudad. El hallazgo provino del análisis del contenido microbiano en 9 oficias en 3 ciudades norteamericanas. La piel humana es gran contribuyente a esas comunidades, que se encuentran principalmente en el suelo.
6. El hombre tiburón
Análisis recientes sugieren que las extremidades de los humanos surgieron de un modo particular al encontrarse que comparten el programa genético con las agallas de los tiburones y otros peces cartilaginosos, una hipótesis lanzada hace más de 130 años que había sido rechazada por ‘loca’. Las nuevas técnicas genéticas permitieron establecer esa relación que suma al enigma del origen de nuestras extremidades. El estudio apareció en Development.
7. Yo voy acá
En una llamativa investigación científicos descubrieron que en especies de hormigas que se agrupan en cúmulos para actuar como una balsa y salvarse en inundaciones, cada hormiga ocupa siempre el mismo lugar, lo que sugiere que como los humanos actúan juntas para responder a emergencias con cada uno de los miembros del grupo cumpliendo distintas tareas. El estudio apareció en The Science of Nature.
8. Trasplante benéfico
Ensayos clínicos revelaron que el trasplante de células islote pancreáticas (grupos de células que contienen células productoras de insulina) previene caídas severas potencialmente mortales en el azúcar en la sangre en personas con diabetes tipo 1. Fue muy útil el tratamiento en aquellos con hipoglucemia severa según el estudio en Diabetes Care.
9. El mal sueño de hotel
No es fácil dormir en un lugar nuevo, distinto al habitual, como en la cama de un hotel. Y tiene una razón, acaban de determinar científicos: se debe a que un hemisferio del cerebro permanece más activo que el otro, en un episodio que se denomina el efecto de la primera noche. Por eso la persona se duerme más tarde y duerme mal, y amanece más cansada. El artículo lo publicó Current Biology.
10. Orina energética
Científicos desarrollaron una minicelda eléctrica que puede generar electricidad a partir de la orina, una forma de generación carbono neutro. Un dispositivo que algún día podría usarse en zonas alejadas donde no llega la energía eléctrica, pues además es barato según los investigadores de la Universidad de Bath. El estudio apareció en Electrochimica Acta.
El cerebro: un mundo sorprendente. Foto Wikipedia Commons
¿Pueden las bacterias en los intestinos modificar nuestra conducta? Podría ser. Esto, por extraño que parezca, tiene su razón de ser según estudios con ratones. Podrían incidir en problemas psiquiátricos.
Una investigación publicada en eLife sugiere que unas combinaciones específicas de bacterias en el intestino producen sustancias que afectan el contenido de mielina y provocan conductas de evasión social en los ratones.
O sea que enfocándose en el contenido bacteriano intestinal o sus metabolitos podría ser una forma de enfrentar desórdenes psiquiátricos y enfermedades relacionadas con la mielina, como la esclerosis múltiples.
Esta es una enfermedad autoinmune caracterizada por el daño en la mielina, esa capa aislante alrededor de los axones de las neuronas que permiten la rapidez en la conducción de los impulsos eléctricos.
La ‘mielinación’ es vital en el desempeño diario del cerebro. Un daño en la mielina deriva en la transmisión sináptica defectuosa y en síntomas clínicos. Por ejemplo, estudios previos han mostrado en modelos clínicos de depresión un adelgazamiento de la mielina y una reducción en las fibras ‘mielinadas’.
En el nuevo estudio se identificaron metabolitos producidos por bacterias intestinales que afectan el contenido de mielina en el cerebro de ratones inducidos a mostrar síntomas tipo depresión.
Los científicos transfirieron bacterias fecales del intestino de los ratones deprimidos a otros modificados para no experimentar esa condición. Esa sola transferencia de microbiota fue suficiente para producir conductas antisociales en cambios en la expresión de los genes de la mielina y en el contenido de la sustancia en los cerebros de los ratones que recibieron las bacterias.
En un paso adelante, los científicos identificaron comunidades bacterianas asociadas con niveles más altos de cresol, sustancia que puede pasar la barrera de sangre del cerebro y que en ensayos en laboratorio ha mostrado su capacidad de impedir la formación de mielina en células.
Científicos publicaron en Nature Microbiology un nuevo árbol de la vida que muestra la relación entre todos los seres vivos que los taxonomistas clasifican en tres dominios: eucariotas, bacterias y arqueas. Una de las nuevas ramas consiste de bacterias que son nuevas para la ciencia y que no han logrado ser cultivadas de manera individual en laboratorio. Un estudio que demuestra que de muchos de los organismos que nos rodean no conocemos nada y faltan muchísimos por descubrir.
2. ¿Necesitas carbono?
Un estudio publicado en Science reveló que los árboles no solo usan carbono para provecho propio sino que entregan grandes cantidades a sus vecinos, incluso de distintas especies, mediante los hongos simbióticos en la raíz. El descubrimiento se hizo con carbono marcado, hallado luego en otros individuos. Una muestra de la complejidad d ella vida que demuestra que un bosque es más que la suma de árboles.
3. Un virus de marca mayor
Sí, el virus del zika causa microcefalia y otros defectos cerebrales severos en fetos confirmaron los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos en un artículo en The New England Journal of Medicine en el que se evaluó con rigurosidad el conjunto de evidencias a la fecha. El riesgo es mayor para mujeres en embarazo, pero no quiere decir que todos los fetos desarrollarán esos males a veces mortales..
4. Recuperando el movimiento
Mediante la implantación de un chip en el cerebro y un nuevo dispositivo llamado NeuroLife, una persona paralizada de las cuatro extremidades hace 6 años en un accidente de buceo pudo agarrar una tarjeta de crédito y jugar videojuegos con sus propios dedos y mano, dice un estudio en Nature. El dispositivo interpreta los pensamientos y las señales cerebrales. El chip reconecta el cerebro con los músculos. Un avance sorprendente.
5. Camisetas con antena
Científicos que trabajan en electrónica portátil lograron instalar circuitos con 0,1 milímetro de precisión, lo que permitirá su integración en las prendas de vestir, por ejemplo camisas, no solo para enviar y almacenar información digital de la persona para conocer variables fisiológicas y hasta cerebrales, sino que podrían servir de antena para los celulares o tabletas. El avance fue presentado en IEEE Antennas and Wireless Propagation Letters.
6. Monógamos por conveniencia
Podría ser, como sostienen algunos estudios, que los humanos no necesariamente seamos monógamos. Pero un estudio aparecido en Nature Communications sugiere que la monogamia surgió como presión social en tiempos prehistóricos para reducir la presencia de enfermedades venéreas que se expandieron cuando los cazadores-recolectores comenzaron a vivir en comunidades más grandes.
7. Seis caminos al perdón
Para excusarse debidamente por algún error y pedir disculpas, se debe cumplir con 6 componentes y así asegurará más que sean aceptadas las disculpas. Si no dispone de tiempo, debe cumplir al menos con 2 de los componentes, reconocer la responsabilidad y ofrecer una reparación. Los otros son: expresar arrepentimiento, explicar cuál fue el error, declarar no repitencia, y solicitar olvido. El estudio apareció en Negotiation and Conflict Management Research
8. En formación
Tal vez por las fluctuaciones de masa en el universo temprano, numerosos agujeros negros supermasivos detectados con radioastronomía emiten chorros de material en la misma dirección, lo que indica que tienen el mismo giro, un hallazgo que aporta información sobre la evolución de las galaxias. El artículo apareció en Monthly Notices of the Royal Astronomical Society.
9. Haciendo metástasis
Dos clases de medicinas usadas para tratar la diabetes tipo 2 pueden incrementar la metástasis en tumores, según estudio con ratones dice un artículo en Science Translational Medicine. Esos dos compuestos activan una respuesta de un mecanismo antioxidante que fomenta la presencia de proteínas promotoras de la metástasis. El estudio concuerda con otros que ya habían sugerido que mostraban el papel de los antioxidantes en la metástasis.
10. Polvo universal
La nave Cassini que estudia el sistema de Saturno hace varios años recogió y analizó polvo interestelar proveniente de fuera del Sistema Solar, encontrando partículas con un tamaño de solo 200 nanómetros. Ese polvo es parte del material interestelar de gas y helio, así como elementos pesados que pueden surgir de los procesos de condensación de estrellas y planetas. Se identificaron 36 partículas con origen interestelar. El informe apareció en Science.