Invasión: un mineral llamado brownleeita, fue descubierto dentro de una partícula de polvo interplanetario en la Tierra que parece haberse originado en el cometa 26P/Grigg-Skjellerup, descubierto en 1902 y que cada cinco años se asoma por estos lugares del Sistema Solar.
No menos relevante: tomó varios meses obtener los resultados del estudio, dado que los granos eran de solo 1/10.000 de una pulgada. La investigación la dirigió Keijo Nakamura-Messenger, de la Nasa.
A los océanos de la Tierra y al mar subterráneo en Europa, luna de Júpiter, súmeles otro: el que parece haber detectado la sonda Cassini, que hace años estudia a Saturno y su sistema de satélites.
El mar de agua y amoníaco se encuentra bajo la superficie de Titán, una luna que con sus dunas, lagos, canales y montañas tiene una de las más variadas y activas superficies que recuerdan el paisaje terrestre.