Nada más inconveniente para una campaña política que trabajar con base solamente en el entusiasmo. Las ganas o la saturación de actividades son un placebo para los inexpertos y les da la sensación de estar alcanzando su meta, pues generalmente esgrimen que han caminado mucho, apretado muchas manos, pegado miles de afiches, tomado café en muchos hogares y acabaron varios pares de zapatos, pero, el dia de las elecciones, su derrota evidencia una enfermedad crónica: Activitis Inutilitis.
Colombia supo de Daniel Quintero cuando lideró el partido del Tomate, al menos fueron los medios de comunicación quienes le relataron al país sobre una alternativa disruptiva que iba en contra de la política tradicional bajo un presupuesto que apelaba a los sectores jóvenes e inconformes con la práctica tradicional de lo público.
Años después de varias decisiones que lo hicieron participar de diversos proyectos en la política e incluso ser vice ministro del gobierno de Juan Manuel Santos, Quintero regresa a Medellín, la ciudad donde nació y donde – según él- creció con muchas dificultades económicas en un hogar de clase media, el cual debió ayudar a sostener cumpliendo con las mas variadas tareas laborales alternadas con la formación académica.
Daniel es Magíster en Administración de Negocios de la Boston University; especialista en Finanzas en la Universidad de los Andes e Ingeniero Electrónico de la Universidad de Antioquia.
Quintero Calle se ha dado a conocer por sus continuas críticas al manejo de las Empresas Públicas de Medellín, llamada la “Joya de la Corona” y una entidad pública que financia buena parte de las macro obras que ejecuta la alcaldía de la ciudad. “Amigo el ratón del queso y aun así se lo come. A EPM se lo comen por billones sin consideración y Medellín tiene que saberlo” afirmó Daniel en una simbólica intervención ante el Concejo de la ciudad a la cual llevó un gran pedazo de queso que le entregó al gerente del ente autónomo, Jorge Londoño o cuando instaló unas gafas gigantes en la Plazoleta de la Alpujarra – según él- para hacerle ver al alcalde la verdad sobre lo que ocurre en el proyecto Hidroituango.
Aunque en los ultimos días, Quintero Calle logró la adhesión del ex candidato Luis Bernardo Vélez, inscribió un movimiento llamado Independientes y entregó a la registraduría casi 200.000 firmas recolectadas en las calles de la ciudad; sabe que afronta el reto de una sociedad conservadora que defiende con capa y espada a EPM, Hidroituango y no ve con buenos ojos que el año anterior haya hecho parte de un sector que apoyó al ex aspirante Gustavo Petro a la Presidencia de Colombia.
Equipo MPG
La comunicación de gobierno ya dejó de ser aquella que se hace desde los gabinetes, oficinas o direcciones de comunicaciones y pasó a ser esa que es liderada por verdaderos estrategas que conocen un líder, un gobierno y saben orientar la opinión externa en clave de defensa e influencia del entorno para poder llegar y quedarse en la mente y el corazón de los ciudadanos, gestando proyectos políticos de líder y-o territorios para el largo plazo.
La inscripción de candidatos por firmas es una figura que se ha tornado popular en el país. En las capitales más grandes de Colombia, para 2015, triunfaron movimientos inscritos por firmas, así: En Bogotá, Enrique Peñalosa lideró con un movimiento llamado Bogotá Mejor para Todos, por su parte, en Medellín, Federico Gutiérrez ganó el sufragio con el movimiento Creemos. Además, este año, en las elecciones a la presidencia existieron ocho movimientos que inscribieron candidatos y tres que no superaron el umbral. ¿En 2019 se repetirá este fenómeno?
A un año de las elecciones regionales, la pregunta que los analistas se hacen es: ¿Cómo será el mapa político regional de Colombia? Con el cambio de partido en la Presidencia de la República, pareciera que todo fuera a cambiar, pero las elecciones regionales cuentan con dinámicas diferentes en un año volveremos a ir a las urnas en democracia para elegir nuevos alcaldes, gobernadores, concejales y diputados en Colombia.
En los años 60, cuando la profesión de la comunicación era joven e inmadura se pensaba que la relación con los medios masivos de comunicación lo era todo y que comunicar era salir en los medios.
La marca de un gobierno nunca está por encima de la marca de un territorio y ambas representan el escenario de percepción colectiva que hace más visible y poderosa la marca de un gobernante, incluso sin que la imagen de este se deba exponer.
El estratega uruguayo Daniel Esquivel, escribe un valioso texto que no solo aplica para quienes planean hacer una estrategia política, sino para quienes lo quieren gestar en cualquier ámbito de su vida cotidiana. Muy recomendado.