En un año preelectoral cualquier acontecimiento, salida en falso, opinión o escándalo puede cambiar, para bien o para mal, el curso de una campaña política. El caso Odebrecht, por ejemplo, llegó en el peor momento para Óscar Iván Zuluaga. El ruido que genera el presunto pago de esa empresa a un estratega de su pasada campaña, afecta su imagen y toca al Centro Democrático.
A esto se suma la carta que Luis Carlos Restrepo le envió al expresidente Álvaro Uribe, en la que le sugiere que el Comité de Ética investigue esta conducta, pues considera que así Zuluaga no estuviera enterado de los posibles pagos de Odebrecht a Eduardo Mendonça, faltó a la ética por contactarlo a través de una empresa contratista del Estado.
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Como respuesta, Uribe le pidió al Comité que asuma la investigación. “Creo urgente emplazar al señor Mendonça, para que diga por qué no informó al Dr. Zuluaga o a los directivos de la campaña sobre ese pago adicional, o si informó, a quién lo hizo”. También les solicitó ajustar los estatutos para que en adelante los candidatos no puedan tener este tipo de relaciones con firmas contratistas del Estado.
Agregó que las campañas de Santos en 2010 y 2014 no han respondido al requerimiento ciudadano de publicar la totalidad de gastos. “Nunca se quiso investigar la denuncia que habrían recibido aportes de asesores que fueron voceros del narcotráfico”.
Duque viajó a Brasil
El senador y también precandidato, Iván Duque, le dijo a EL COLOMBIANO que viajó a Brasil por invitación de Zuluaga y su hijo David, en febrero de 2014, a una reunión con el publicista Mendonça. Añadió que la campaña en ese momento estaba buscando un asesor externo y él era el encargado del plan de gobierno.
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“El doctor Zuluaga pagó mi viaje a São Paulo, mis tiquetes y mi hotel. Mendonça hizo una presentación de sus experiencias en campañas políticas, preguntó por la situación política en Colombia. Como lo dijo el doctor Zuluaga, él se encargó de la negociación. Yo no tenía ninguna responsabilidad administrativa”.
Duque agregó que no tiene ningún tipo de relación con Odebrecht y que la semana pasada la denunció ante la Superintendencia de Industria y Comercio para que se investiguen sus prácticas de violación de la libre competencia, por la entrega de sobornos.
¿Campaña al congelador?
Este cruce de denuncias podría postergar las precandidaturas en el CD. En palabras de José Olimpo Suárez, coordinador de la Maestría en Estudios Políticos de Bolivariana, lo ocurrido demuestra que no existe una unidad de criterio.
“Es probable que Zuluaga no pueda ser candidato. Odebrecht sería su talón de Aquiles y ningún partido puede jugar con esa situación. Este hecho lastima la unidad. Zuluaga deber permanecer dentro y apoyar otra figura. Quedarían Duque y Holmes, porque la opción de Luis Alfredo Ramos, una carta política, está en manos no de los político si no de los jueces”.
Según Diego Cediel, docente de Política de La Sabana, las declaraciones de Uribe y Restrepo apuntan a que los partidos políticos tienen procesos internos de investigación y depuración, necesarios en una democracia, puesto que deben fortalecer sus procedimientos de transparencia. “Necesitan mandar un mensaje de credibilidad, con el ánimo de que no afecte a su potencial candidato o alianza con otras colectividades. Es poco probable que sea Zuluaga”.
Al respecto Mauricio Jaramillo, docente de Política del Rosario afirmó que la aspiración de Zuluaga está minada, pero no necesariamente por Odebrecht si no por la división interna. Agregó que lo de la constructora afecta es al uribismo y a las personas cercanas a Uribe que son investigadas. “Va a prevalecer el pragmatismo y buscarán un candidato que pueda generar más cohesión”.
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millones de dólares habría pagado Odebrecht al estratega Mendonça.
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