Otros dos policías a imputación de cargos por muerte de Javier Ordóñez

Los dos nuevos uniformados vinculados al caso responderán por presunta acción y omisión de sus funciones constitucionales. FOTO COLPRENSA

La Fiscalía General de la Nación solicitará una nueva audiencia de imputación de cargos dentro del proceso que se adelanta por la muerte de Javier Ordóñez, quien falleció el pasado 6 de septiembre mientras estaba bajo custodia de la Policía en el CAI Villa Luz del barrio Santa Cecilia de Bogotá.

El ente investigador imputará cargos a otros dos patrulleros de la Policía, al considerar que tiene pruebas suficientes para vincularlos a ambos al proceso por la muerte del ingeniero aeronáutico y estudiante de Derecho de 42 años, por lo que tendrán que responder por presunta acción y omisión de sus funciones constitucionales.

Esta diligencia se hará efectiva el 9 de febrero de 2021 de manera virtual y por ahora se mantiene en reserva el nombre de los dos policías que serán vinculados a este caso, por el que la Procuraduría ya destituyó e inhabilitó por 20 años a los expatrulleros Juan Camilo Lloreda y Harby Rodríguez.

Esta nueva imputación de cargos dentro se hará efectiva gracias al avance que ha hecho la Fiscalía en las pesquisas que adelanta para tratar de identificar a más uniformados que hayan estado involucrados en la muerte del hombre en la localidad de Engativá.

Los dos expatrulleros (Rodríguez y Lloreda) que ya están siendo procesados por este caso fueron señalados por la Procuraduría de cometer un acto contra el derecho a la vida de un ciudadano que debía ser cuidado por los policías, pero contrario a esto le realizaron acciones ilegales “para causarle la muerte sin tener la más mínima consideración”.

De acuerdo a lo concluido por el ente de control, antes de que Ordóñez llegara al CAI de Villa Luz, el patrullero Lloreda le proporcionó múltiples descargas eléctricas con un taser. Por su parte, los uniformados aseguraron en su defensa que esto fue producto de un procedimiento para disolver una riña, pero la Procuraduría dedujo, gracias a los videos del hecho, que hubo un enfrentamiento físico contra el ciudadano.

Después de que fue electrocutado, Ordónez fue llevado al CAI donde posteriormente lo esposaron y dejaron en un estado de indefensión, para luego golpearlo “hasta cuando ya no se movía ni daba alguna muestra de vida”, puntualizó el Ministerio Público.

Paralelo a estas conclusiones del ente de control y debido a los mismos hechos, la Fiscalía imputó por su parte a los dos patrulleros como presuntos responsables de los delitos de tortura agravada y homicidio agravado.