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Descuidar la casa sale muy caro
Para hallar un inicio de liga como local tan discreto de Nacional, como el actual, hay que remontarse 5 años.
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Nacional solo celebró por Liga este semestre enfrentando a Alianza Petrolera, juego que ganaba de forma holgada (3-0) y terminó sufriendo con marcador final (3-2). FOTO robinson sáenz
07 de septiembre de 2018
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Pocas cosas agudizan tanto los problemas en los clubes como perder la autoridad en condición de local. Aún en tiempos convulsos, mientras la afición se marche a casa con un buen marcador, aunque sea sufrido, las dificultades pueden hacerse más llevaderas.
Pero no es el caso de Nacional. Con su derrota ante Bucaramanga (2-3), el cuadro verde suma una victoria, dos empates y dos derrotas en casa y consolidó así su peor inicio en los primeros cinco juegos como local desde el Apertura-2013, cuando encadenó cinco empates.
Pese a ese inicio en aquella ocasión clasificó a finales. Lo que no le ocurrió en el Finalización-2011, cuando arrancó exactamente igual a este torneo y se quedó por fuera de los ocho, algo que no sucede desde hace 12 campeonatos, en un escenario impensado.
El impacto de los resultados se ha sentido tremendamendamente en las taquillas. En los primeros compromisos de local en la Liga pasada el promedio fue de 20.637 hinchas; hoy es de 15.279.
Salvo el partido contra Millonarios, por la tercera fecha, y que congregó 21.433 espectadores en el Atanasio, cada juego de local del conjunto antioqueño ha tenido menor convocatoria que el anterior.
“La reacción de la afición de alejarse del estadio cuando las cosas van mal es instintiva y respetable. Pero es necesario, en estos momentos, tener cabeza fría. Lo que menos necesita el club ahora es sumar un bache económico”, considera el extécnico verdolaga Óscar Héctor Quintabani.
Su preocupación no es menor, pues el mismo presidente de la institución, Juan David Pérez, reconoció en días pasados que la eliminación de Copa Libertadores propinaría un golpe a las arcas del club por las taquillas y consecuentes premios por avanzar en el certamen continental.
Son cifras significativas; en la campaña 2016, por ejemplo, las buenas taquillas hicieron parte del 35% de los ingresos totales de la institución (161 mil, 125 millones de pesos).
Desde ese período hasta ahora, la cantidad de abonos por semestre ha decrecido de 30.000 a 17.000 actuales.
Presionar con la presencia
Para Quintabani, quien conoció el lado dulce y amargo de dirigir a Nacional, entre 2007 y 2008, “colmar el estadio es la presión más efectiva para buscar un cambio”.
Y es que, incluso, en una de las más agudas crisis, en 2008, la hinchada respondió masivamente. En esa ocasión, un caso particular ocurrió en el juego ante Pereira, por la fecha 11, cuando el cuadro verde sumaba apenas 12 de 33 puntos posibles, y que convocó 25.000 hinchas en medio de un descontento que desencadenó en varias protestas.
Hallar buen refugio en casa puede ayudar a calmar las aguas mientras llegan soluciones de fondo. Es urgente para liberar la presión que está colmando las tribunas, donde las alegrías no se asoman desde hace varios meses
15.279
es el promedio de asistencia de este semestre en Nacional sumando Liga y Libertadores.
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