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En las estadísticas Chicó se muestra como un rival débil y ante el que, Rionegro, ha sacado buenos dividendos. En los últimos 15 choques, las Águilas del Oriente registra 10 victorias, cuatro empates y una derrota, por lo que la consigna para esta tarde es lograr los tres puntos.
“Las expectativas son las mejores, si queremos seguir en el tren de los líderes debemos sumar los tres puntos, para eso nos preparamos y vamos a lucharla para obtener la primera victoria en casa, haciendo bien nuestro trabajo. Hemos corregido errores sobre todo en pelota quieta para mejorar en la definición”, dijo el técnico Bernal.
En condición de visitante Chicó tiene un empate y una derrota en la Liga Águila-2, ante Millonarios y Medellín, respectivamente, 2-2 y 2-0.
La motivación es alta, ya que vienen de remontar un marcador adverso en Neiva, donde se rescató un punto, al terminar 2-2.
“El compromiso ahora es brindar alegrías a nuestros hinchas, saldremos por la primera victoria en casa”, dijo César Ramírez, central que marcó de tiro libre ante Huila.
La única novedad de los locales será la presencia de Estéfano Arango, último refuerzo, quien fue llamado para hacer parte de los convocados y estará en el banco, a la espera de debutar.
“Tengo mucha ilusión de jugar, estoy agradecido con esta oportunidad de volver a estar en el fútbol de mi país y en cada entrenamiento he dado al máximo para ganarme un lugar”, dijo Estéfano.