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Los cuatro mejores tenistas del país se hicieron presentes en el Claro Open de Medellín y generaron mucha expectativa sobre un triunfo local.
Lo cierto es que Alejandro González, quien cayó en segunda ronda; Alejandro Falla, Eduardo Struvay y Santiago Giraldo, perdedores en cuartos de final, les quedaron debiendo a los espectadores paisas.
Héctor Monroy, director ejecutivo de la Liga Antioqueña de Tenis, cree que no hay una causa clara de la debacle criolla en el torneo. “Pude hablar con los jugadores y la conclusión que sacamos es que los internacionales están en mejor momento. El nivel challenger es alto”.
Esta posición la defiende Carlos Héctor Zuluaga, entrenador de la liga paisa, quien cree que Joao Souza, Rogerio Dutra o Facundo Bagnis son jugadores que han mostrado su jerarquía en el certamen.
“A eso hay que agregarles que a los nuestros les cuesta tanta competencia, vienen con mucha carga”, explica.
Falla, por ejemplo, viene de varias lesiones. Struvay, González y Giraldo disputaron la serie de Copa Davis ante República Dominicana hace 15 días y, según Zuluaga, eso les merma el rendimiento.
Por tal motivo, Héctor Monroy cree que una solución para mejorar es confeccionar mejor el calendario. “El trabajo del aspecto físico también va a ser vital. En este torneo noté que se quedaron mucho en los partidos y los rivales aprovecharon”.
Una situación que tampoco se puede desconocer es el ranquin de los cuatro: Giraldo es 129; González, 167; Struvay, 194 y Falla, 262. “Ellos tienen que tener la mentalidad de que van a revertir la situación”, asevera Zuluaga.
Aunque las situaciones son diferentes, y las comparaciones pueden resultar odiosas, hay un modelo como el argentino que ha resultado exitoso: hoy están en la final de Copa Davis y tienen ocho raquetas dentro del top-100 de la ATP.
“Lo que pasa es que en Argentina se trabaja en conjunto lo sicológico y físico, así como el tema de kiniesología y por eso tenemos buenos resultados. Ojalá que en Colombia se pueda aplicar”, revela Facundo Bagnis, uno de los mejores del Claro Open que llega hoy a su ronda final.
Este certamen demostró que la artillería colombiana no está fina y quedó una deuda (física, mental y deportiva) con el público paisa.