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El Suroeste es apetecido por todos los candidatos
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En el municipio de Ciudad Bolívar la publicidad política es escasa. Según varios de sus habitantes pocos candidatos han visitado la zona. En la foto la calle principal. FOTO Carlos Velásquez
02 de marzo de 2018
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La región cafetera y minera del Suroeste es vista como un tesoro por la clase política antioqueña. A diferencia de otras zonas del departamento, donde muchos no van la distancia, aquí se llega en una hora desde Medellín. Siempre los candidatos presidenciales y los presidentes la han visitado.
De esta zona de Antioquia salieron dos presidentes en tres décadas (Belisario Betancur y Álvaro Uribe) y hoy es la que tiene más representantes en la Cámara, 6 de 17. Además, tiene el mayor número de candidatos a Congreso, al menos 15.
Aunque es de tradición conservadora, cuna de beatos y de Santa Laura, también hay municipios de hegemonía liberal, como Venecia y Tarso. De este último es oriundo el representante Óscar Hurtado. En la última década se abrió paso La U, cuando era de Uribe, incluso, sus dos actuales representantes son de Santa Bárbara (León Darío Ramírez) y Andes (Juan Felipe Lemos).
Y de los tres representantes del Partido Conservador, dos son Támesis (Germán Blanco) y Andes (Horacio Gallón). Paradógicamente, ninguno de los seis representantes del Centro Democrático es del Suroeste, pero esta vez dos tienen amplias posibilidades: Juan Espinal (Jericó) y Hernán Saldarriaga (Andes).
Además, el único representante por Antioquia de un partido de izquierda, el Polo Democrático, también es de esta región, Víctor Correa (Concordia), quien ahora aspira dar el salto al Senado.
Amagá, tierra del carbón
Todo esa efervescencia de políticos contrasta con la apatía electoral. Hace cuatro años participaron menos del 39 % de los votantes. Aunque estaban habilitadas para votar 287.274 personas solo sufragaron 109.675.
Al Suroeste se ingresa a través de Amagá. Es común ver camiones cargados de carbón salir de las cercanías, pues esa es la principal actividad del pueblo. En el cruce del principal acceso al pueblo hay un valla gigante que dice: “Amagá es territorio Centro Democrático”.
Este municipio es disputado electoralmente por dos fuerzas políticas, la del alcalde Wilser Molina (Centro Democrático) y la del exalcalde Juan Carlos Amaya (Partido Conservador).
Según Alexander Peláez, habitante de la zona, “como esto queda tan cerca de Medellín vienen a cazar voticos aquí y allí, pero no mientan la minería, para evitar más tragedias”.
Este año han ordenado el cierre de algunas minas, lo que ha dejado al municipio en una situación complicada. “Muchos mineros se están compraron moto para hacer acarreos o transportar gente. Los despidos son constantes”, asegura Julio Mateus, mientras se toma un tinto en el estadero Paso Nivel.
Ciudad Bolívar y sus arrieros
Este municipio se estira como parte de la carretera que conduce hacia Quibdó (Chocó). La publicidad política es escasa. Solo hacen eco de los candidatos pocos postes empapelados, una pancarta en la fachada de un negocio y un pasacalle que se ondea solitario con la foto de dos candidatos al Congreso.
Según los habitantes, que charlan a la sombra de la parroquia de la Inmaculada Concepción, los políticos no han ido a las veredas y se han concentrado en el pueblo, incluso, un directivo del Centro Democrático dijo que solo a pocos días de las elecciones iban a comenzar la campaña en los lugares cercanos al casco urbano.
Esa falta de interés de los políticos en la campaña también. “Uno a veces ve a los candidatos en el parque, pero no muchos asisten porque son las mismas promesas de siempre. Que no venga nadie si no van a cumplir”, afirma un lugareño.
Andes, capital de la región
Para llegar a Andes se recorre la Troncal del Café entre Caldas y Bolombolo (Venecia), tierras calientes y llenas de vegetación que escala las montañas en las que se encumbran la mayoría de pueblos del Suroeste.
A la entrada de Hispania, así como en las carreteras, se ven pasacalles de los partidos políticos que dominan la región, el Centro Democrático, el Partido de la U y el Conservador.
Andes queda en medio de montañas. Sus calles empinadas recuerdan que esa zona se desarrolló con la ayuda de las mulas que llevaban cargas de café. Sin embargo, Delio Escobar, caficultor, dice que el precio del grano ha afectado la región y sugiere a los próximos gobernantes adelantar un programa “tipo Finagro que financie los fertilizantes”.
La urbanización Villa Javier, entregada en el programa de las 100 mil casas gratis del Gobierno, se está cayendo y fue desalojado el bloque 5. Una coyuntura perfecta para “pescar” votos. “Aquí han venido candidatos y han dicho que tienen la solución en la mano, siempre y cuando sean elegidos”, dice Javier Montes.
Subiendo la montaña queda la plaza central, coronada por la Iglesia de Nuestra Señora de las Mercedes. Allí trabajadores y dueños de los cafetales están adquiriendo mulos para las siguiente cosecha, toman tinto y debaten, “politiquean”.
Algunos discuten sobre la campaña. Dicen que los dos varones electorales son Lemos y Gallón, hijos de ese pueblo. Entre ellos se echan ‘agua sucia’. El primero, (sobrino de Mario Uribe) quiere dar el salto al Senado y el segundo repetir en Cámara. Ambos han logrado, al margen del abstencionismo, grandes votaciones en el Suroeste.
El Centro Democrático es el partido con mayor músculo en esta región, a la luz de los resultados electorales de 2014 y 2015. En el pasado plebiscito, en todos sus 23 municipios se impuso el voto por el No, pero Sergio Fajardo también ganó en muchos de estos territorios cuando aspiró a la Gobernación.
A dos semanas de las elecciones para Congreso, la tendencia todavía no es clara en materia de votación. Cuando se le pregunta a los líderes políticos de la zona todos hacen apuestas que superan los mil votos en los municipios más grandes, como Amagá, Andes, Betulia, Ciudad Bolívar, Fredonia, Jericó, Salgar y Urrao.
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