El de la mayor necesidad el domingo en el clásico vallecaucano 268 era América, por su precaria ubicación en la tabla de posiciones y su paupérrima campaña en la Copa Mustang I.
Pero los rojos, que merecieron mejor suerte por lo hecho especialmente en el remate del partido, se tuvieron que ir con el sinsabor de un empate 1-1 ante su rival de patio, el Deportivo Cali.
A los azucareros les cayó bien la igualdad porque, además de mantener el liderato del torneo, sumaron un punto con un fútbol que poco agradó a su fanaticada.
Mientras el Cali está mirando a todos desde arriba, sentando en la comodidad que entrega el primer lugar en la tabla de posiciones, América está bien abajo, naufragando en su mar de irregularidades y cediendo cada vez más terreno en sus intenciones de llegar por lo menos a la octava casilla.
Los goles
A los 20 minutos el Deportivo Cali llegó al gol. Fue un centro desde la izquierda de Juan Guillermo Domínguez que Carlos Valdés rechazó de manera defectuosa, el balón quedó suelto y allí, casi en el punto penal, llegó Danny Aguilar para meter un cabezazo que superó la estirada de Julián Mesa.
El gol en contra despertó al América y por eso cuatro minutos después empató con otro cabezazo impecable de Adrián Ramos, para el 1-1.
Ya con la igualdad el clásico se tornó muy cortado por las numerosas faltas; a eso se le agrega que por la velocidad que ambos equipos quisieron imponer, no hubo claridad en los momentos de arribar a predios contrarios.
Pese a ese panorama, el primer tiempo fue ligeramente favorable para el Cali. El segundo fue casi todo para el América, que tuvo más fondo físico y más arrestos que su rival de patio, acariciando incluso el gol del triunfo como en esa acción del minuto 74 cuando Diego Chará estrelló su remate en el horizontal.
La igualdad no se alteró para preocupación de un América que sigue sin ganar, y para felicidad de un Cali que jugando mal se mantiene en el tope de la tabla.
Pico y Placa Medellín
viernes
3 y 4
3 y 4
