Medellín está de moda en el país y nos visitan compatriotas de muchas regiones que quieren conocer la transformación registrada en la ciudad. Les gusta su clima, su metro y metrocables, sus urbanizaciones, sus nuevos sitios para la lúdica y la recreación como los parques biblioteca o el Jardín Botánico y Explora, el verde de sus montañas y en particular la calidez de los antioqueños.
Pero muchos lamentan que la gente no tenga un buen comportamiento en los sitios de diversión, que para entrar a cualquier parte la gente no respete las filas, sea grosera, cree congestión y caos.
Nuestra cultura, esa que observamos al entrar al Metro, tiene que vivirse en todos los sitios de la ciudad.