En Aracataca (Magdalena), la patria chica del fallecido Premio Nobel de Literatura Gabriel García Márquez, en Ciudad de México y en Bogotá, todo se encuentra listo para dar inicio a los actos póstumos en memoria del ilustre escritor colombiano fallecido el pasado Jueves Santo.
En la tierra de Macondo, creada por la prodigiosa imaginación de Gabo, el Museo que lleva su nombre está adornado con decenas de sus fotografías, manuscritos y otros elementos personales del “colombiano más universal de todos los tiempos”, como lo definió el presidente Juan Manuel Santos.
Sus habitantes han llevado a la casa cultural de Aracataca mariposas amarillas para recordar el legado cultural y periodístico de García Márquez.
Desde que se conoció de su fallecimiento, en la Casa Museo no ha cesado la peregrinación de turistas llegados desde diferentes zonas del país, tampoco ha parado la vigila nocturna con velas y la narración de historias y anécdotas de Gabo.
Este lunes, simultáneamente con los actos que tendrán lugar en Ciudad de México, en Aracataca se realizará una ceremonia litúrgica y un sepelio simbólico, a la espera de que la familia del escritor y periodista decida qué hacer con sus cenizas.