Las muertes de los guerrilleros alias "Jaimito" y alias "el Burro", el pasado fin de semana en un bombardeo, mandan un mensaje alentador sobre la continuidad de la ofensiva de las Fuerzas Armadas contra las diferentes estructuras de las Farc en el país.
Estos dos subversivos eran objetivos de alto valor en la zona del Cauca, donde fueron conocidos por liderar constantes ataques a la fuerza pública y sus guarniciones. Cientos de civiles sufrieron los daños producidos por los "tatucos" arrojados por los hombres al mando de estos delincuentes.
Se trata, además, de dos de los jefes de máxima confianza de alias "Pablo Catatumbo" y "Sargento Pascuas", integrados a la comisión de las Farc en las conversaciones de La Habana.
Los cambios recientes en la cúpula militar deben servir para mantener claro el mensaje: el combate al terrorismo no se detiene. Fe en la causa.
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