No es una cuestión de obediencia, pero para llevar una dieta óptima es preciso seguir la recomendación de la Asociación Colombiana de Nutrición Clínica (ACNC) y tragar "entero".
La organización está adelantando una campaña que promueve el consumo en Colombia de "grano entero". Es decir, cereales en su forma natural. El trigo, el maíz, la avena, la linaza y el centeno son algunos de los más comunes, y en el mundo de la nutrición también son conocidos como granos.
"Hay que saber escoger los productos integrales con grano entero, y buscar que éstos no sean refinados, de manera que mantengan sus beneficios para la salud de quienes los consumen", afirma la presidenta de la ACNC, Claudia Angarita.
¿Cómo reconocerlos? "En la etiqueta sale el contenido nutricional y en la parte que dice carbohidratos se ve una subdivisión que dice 'fibra dietal'. Lo ideal es que un alimento rico en fibra debe aportar al menos el diez por ciento de la recomendación diaria", explica Angarita.
Diariamente, el cuerpo humano necesita recibir por lo menos 25 gramos de fibra. Por lo tanto, cada porción que realmente sea rica en fibra debe aportar 2,5 gramos.
Entero y natural
Conservar el germen, el salvado y la endosperma de los cereales garantiza una alta dosis de fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes que se pierden con el procesamiento de algunos de estos cereales.
"Para reducir el riesgo de padecer enfermedades crónicas, se recomienda el consumo de mínimo tres raciones diarias de alimentos con grano entero", dice Angarita.
Cada ración equivaldría a unos 16 gramos, según los representantes de la ACNC. Estos, por ejemplo, se cumplirían con el consumo de una tostada.
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