A pesar de los llamados del Gobierno y del sector empresarial de no continuar con el alza en las tasas de interés, el Emisor no desvía su curso y permanece enfocado en su razón de ser: mantener a raya la inflación.
La Junta Directiva del Banco de la República subió ayer sus tasas 25 puntos básicos, a 5,25 por ciento. Aunque la decisión no fue unánime y solo apoyada por cuatro miembros (tres en contra), lo hizo en línea con las expectativas de los analistas del mercado, pero en contra de lo que le había pedido el presidente Juan Manuel Santos unas semanas atrás.
"Muchas veces se presenta el dilema entre inflación y empleo. Lo que yo le pediría al Banco de la República es que crea en la política económica del Gobierno y que nosotros estamos haciendo unos cambios estructurales que nos van a permitir crecer a tasas altas con baja inflación, como lo estamos demostrando", expresó el Presidente.
Un llamado parecido hizo el presidente de la Andi, Luis Carlos Villegas, quien había advertido que "el buen momento de crecimiento de los distintos sectores puede verse frenado por el alza en las tasa de interés y el buen momento de las exportaciones frenado por una tasa de cambio, que por la vía de más altos intereses, se va a devaluar más".
El Emisor, firme
A pesar de estas presiones para adoptar una política monetaria menos contractiva, la Junta Directiva del banco Emisor tomó como alerta de un posible recalentamiento de la economía el fuerte dinamismo del crédito, unas expectativas de inflación que todavía no se ajustan a su meta del 3 por ciento y un crecimiento del PIB muy por encima del potencial.
"La información más reciente sugiere que en el cuarto trimestre de 2011 la economía colombiana continuó mostrando un fuerte dinamismo y que este comportamiento se ha mantenido a comienzos de 2012. En enero, el índice de confianza de los consumidores aumentó por tercer mes consecutivo y alcanzó niveles históricamente altos", señaló la Junta en su comunicado.
Adicionalmente, recordó que en enero la inflación anual fue de 3,54 por ciento y espera que "con las recientes acciones de política (de aumentos en las tasas de interés), las expectativas de inflación converjan hacia el punto medio del rango meta (3,0 por ciento)".
Nubarrones en Europa
El Emisor también dejó claro que existen riesgos para la economía colombiana provenientes del exterior: una demanda externa que se desacelera, un crecimiento económico negativo en Europa y un crecimiento en Estados Unidos "algo inferior a su potencial".
Sin embargo, este no parece ser un factor preocupante para la Junta del banco, pues la economía colombiana viene creciendo muy por encima de su potencial, que se sitúa entre el 5,0 y el 5,5 por ciento como crecimiento del PIB.
Para José Fernando Restrepo, director de Investigaciones Económicas de la firma Interbolsa, es precisamente el fuerte dinamismo de la economía una de las principales razones para el aumento en la tasa de interés.
"Todavía la economía viene creciendo a un nivel alto (7,7 por ciento en el tercer trimestre de 2011). Si la Junta ve que el PIB se está alejando demasiado de su línea tendencial, sería prudencial intentar bajarle un poco las revoluciones al crecimiento económico, además de anclar las expectativas de inflación en el 3 por ciento", señaló.
El Emisor extenderá el programa de compras diarias de dólares por montos mínimos de 20 millones de dólares al menos hasta el 4 de agosto del presente año, con el objetivo de frenar parcialmente la caída en la tasa de cambio.
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