En marzo de este año, la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios anunció la firma del acuerdo, con inversiones por 53.507 millones de pesos hasta el año 2015, para construir las redes y operar el acueducto de Quibdó, la capital de Chocó, donde el agua potable siempre había sido escasa.
Ahora, ese acuerdo se hace realidad. Empresas Públicas de Medellín (EPM) anunció que a través de EPM Bogotá Aguas, asumió oficialmente la operación de los servicios de acueducto, alcantarillado y aseo en la zona urbana de esa ciudad.
El convenio interadministrativo se firmó entre EPM y Empresas Públicas de Quibdó en Liquidación, pero fue necesario el apoyo de la Superintendencia de Servicios Públicos, de la Alta Consejería Presidencial para el Chocó, del Ministerio de Ambiente y Vivienda y de otras entidades oficiales.
Tendrá una vigencia de 7 años e incluirá la interventoría a la gestión de inversiones y a las obras que ejecuten con varios contratistas.
Federico Restrepo Posada, gerente General de EPM, explicó que "el objetivo del proyecto es implementar un plan de choque con inversiones prioritarias en el corto plazo y con el apoyo financiero de la Nación, en consideración a las condiciones socioeconómicas de la población, a la debilidad de las finanzas del propio municipio de Quibdó, y a la magnitud de las inversiones requeridas para mejorar tanto las coberturas, como la confiabilidad de los servicios".
E indicó que se busca remediar la crítica situación de los servicios de acueducto, alcantarillado y aseo en Quibdó, cuyos habitantes carecen de agua potable. "Disponen de una infraestructura de almacenamiento en pésimo estado, una deficiente red de distribución y de recolección (no existen colectores ni sistemas de tratamiento), y bajísimas coberturas en acueducto y alcantarillado. El indicador de continuidad en la prestación de los servicios apenas llega a dos horas diarias".
Inversiones previstas
El gerente de EPM explicó que las inversiones directas para acueducto y alcantarillado fueron calculadas en 44.548 millones de pesos.
Pero, en esta cifra no se incluyen los recursos para construir las acometidas, es decir, las conexiones entre la tubería principal y las instalaciones domiciliarias, que fueron estimadas en 7.770 millones de pesos.
"Se aspira a que en el año 2014 la cobertura en acueducto llegue al 76 por ciento, y en alcantarillado al 73,6 por ciento", explicó Restrepo.
Y, a corto plazo, EPM adelantará la ejecución de obras prioritarias, como el mejoramiento de las redes de acueducto y alcantarillado del centro de Quibdó y hará una revisión de los tanques que le dan la presión al acueducto.
También modernizará el laboratorio y la automatización del sistema de dosificación de las plantas, para garantizar un mejor control de la calidad del agua.
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