La empresa HeliFly y los familiares de dos pilotos de esta empresa secuestrados por las Farc, asumieron con cautela el comunicado de este grupo subversivo, que anunció la entrega de los dos funcionarios al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y a una Ong.
El Bloque Occidental de las Farc se atribuyó el secuestro, ocurrido el 10 de julio, de Juan Carlos Álvarez, de Tuluá, y Alejandro de Jesús Ocampo, de Medellín, tripulantes del helicóptero Bell 206 L3 que aterrizó de emergencia en un campo de fútbol de la localidad de Argelia, en Cauca, que posteriormente fue incinerado por los guerrilleros.
“Para la liberación de los antes mencionados convocamos una comisión compuesta por delegados de la Cruz Roja Internacional, y la Red de Derechos Humanos Isaías Cifuentes. La fecha y lugar serán dados a conocer al delegado del CICR oportunamente”, rezó el comunicado del grupo guerrillero.
Precisamente el pasado lunes, este diario habló con las esposas de los pilotos, Yolima Gómez y Diana Carolina Gómez, quienes manifestaron su preocupación por la suerte de sus seres queridos. “No queremos tener que pasar una noche más sin ellos”, dijo Yolima, esposa de Juan Carlos. “Ellos no tienen nada qué ver en el conflicto”, afirmó Diana Carolina.
En la zona donde fueron plagiados los tripulantes hacen presencia los frentes 6, 60 y la columna móvil Jacobo Arenas de las Farc, responsables de secuestros, reclutamiento de menores y ataques a los nueve municipios del norte del Cauca.
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