El largo viaje transatlántico de los negociadores del Gobierno y las Farc a Oslo no permitió ningún contacto ayer. Por eso, en medio de optimismo y expectativa, a primera hora de hoy los delegados se reunirán por primera vez para definir la metodología de los diálogos e instalar la mesa de negociación que busca el fin del conflicto armado en Colombia.
Tal como lo había anunciado el jefe del equipo negociador, Humberto de la Calle , sobre la “discreción” que caracterizaría este proceso que apenas comienza hoy, el primer contacto entre los equipos negociadores se llevará a cabo en un sitio secreto de la capital noruega.
Será a puerta cerrada y cuando los colombianos aún duermen. Para las 8:00 a.m. (3:00 p.m. en Oslo) está prevista una rueda de prensa en la que se espera se anuncie la logística definida para la discusión de la agenda de cinco temas acordada en Cuba durante las conversaciones secretas entre febrero y agosto de este año.
Allí se definieron como “hoja de ruta” los temas de tierras y desarrollo rural, participación política y oposición, fin del conflicto, narcotráfico y reparación a las víctimas.
Lo único confirmado por el gobierno noruego, hasta ahora, es la rueda de prensa en el hotel Hurdal, a 75 kilómetros de Oslo. Las delegaciones arribaron por separado a la nublada y fría capital noruega en la madrugada del miércoles y desde una sección reservada del aeropuerto de Oslo fueron trasladados a un lugar secreto.
“Tras un viaje de más de 10 horas, ayer no se efectuó ningún contacto entre las partes y toda la agenda se desarrolla hoy”, confirmó desde Oslo a este diario León Valencia , director de la Corporación Nuevo Arco Iris.
El analista señaló que el ambiente previo es de “optimismo” entre estudiosos del conflicto colombiano presentes en Oslo, prensa y organizaciones de derechos humanos, interesados en el fin del conflicto.
Aunque está claro que en Noruega no se avanzará en las negociaciones, el escenario internacional que brinda este país europeo, reconocido por su política exterior de ayudar a resolver conflictos en el mundo, tiene implicaciones favorables para el naciente proceso de paz.
“Todo empieza en tierra neutral y con un aura de seriedad con cierta distancia de todas las acciones y provocaciones de Colombia”, aseguró a la agencia AP Jan Egeland , director para Europa del grupo no gubernamental Human Rights Watch, quien fue el representante de Naciones Unidas durante los fallidos diálogos de paz en Colombia en el Caguán.
Agregó que el conflicto colombiano “es probablemente la mayor guerra, el mayor problema de derechos humanos, el mayor problema de desplazados, el mayor problema humanitario y el problema del mayor productor de drogas del hemisferio”.
A pesar del optimismo, la realidad de unos diálogos de paz sin cese el fuego se evidencia en Colombia, donde un ataque de las Farc contra un oleoducto en el Valle del Cauca, con saldo de dos personas quemadas, causó rechazo generalizado de los colombianos.
El riesgo de más derramamiento de sangre fue advertido por el Gobierno al anunciar en agosto su decisión de apostarle a un nuevo proceso de paz en medio del conflicto, con las Fuerzas Militares a la ofensiva. Lo ratificó el jefe negociador, Humberto de la Calle, antes de partir a Oslo.
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6