En el área de urgencias de pediatría, en el Hospital Universitario de Santander, HUS, se recupera una niña de tres meses de edad, atacada brutalmente por su padre, quien bajo los efectos del bazuco, le mordió el rostro a la pequeña.
El aterrador caso se registró el lunes a las 12:00 del mediodía en Floridablanca.
El agresor es un hombre de 36 años, taxista de profesión, quien luego de fumarse varias papeletas de bazuco, llegó a su casa y en medio de su exaltación atacó a su propia hija.
La menor, quien sufrió graves lesiones en el rostro, está siendo valorada por un equipo médico de especialistas, que en las próximas horas decidirán el procedimiento a seguir.
“La niña presenta dos lesiones por mordedura humana en la mejilla izquierda y en la frente. Son heridas profundas, será llevada a cirugía para remover la piel y mirar qué procedimiento seguir. Está siendo valorada por pediatría y cirugía plástica, será intervenida, pero aún así, las heridas le dejarán cicatrices”, aseguró el médico Javier Martínez, coordinador de Urgencias del HUS.
El ataque
Basados en las declaraciones que testigos le entregaron a la Fiscalía, las autoridades conocieron los detalles de la grave agresión.
Uno de los testigos indicó que el día de los hechos, es decir el lunes, el individuo llegó a su casa a eso de las 6:00 de la mañana, después de cumplir con su turno como taxista.
“Le dijo a la esposa que le preparara el desayuno. Le hicieron caldo con arepa. Luego sacó $12 mil y se los dio a la esposa y le dijo que comprara lo del almuerzo. Al ratico salió de la casa, sin decir para dónde era que iba, pero aseguró que regresaba a mediodía”, narró el testigo.
“Lo vimos fumando bazuco en el ‘hueco’. Él llevaba ya varios días sin fumar y debió sobrepasarse porque de allí salió como loco”, indicó otro testigo.
Tras terminar de fumar bazuco, el hombre se dirigió a su casa en un completo descontrol. Por lo menos así lo aseguraron los vecinos.
“Estaba tan loco que abrazó a un preventista que estaba en la cuadra y le decía que le iba arrancar la oreja. En esas salió la esposa y se lo llevó para su vivienda y fue ahí cuando pasó lo peor.
El hombre ingresó a su casa y se dirigió a la mecedora donde estaba su pequeña hija a la que abrazó y después mordió en la frente y en el cachete izquierdo.
“La mamá de la niña empezó a gritar pidiendo ayuda. Entonces una vecina entró y como pudo lo desprendió de la bebé, quien no paraba de llorar”, dijo un vecino.
Tras la agresión la bebé fue llevada a la droguería del barrio, donde nada pudieron hacer pues las heridas son de gravedad. Entonces en un vehículo trasladaron a la pequeña a la Clínica Guane, en Cañaveral, donde recibió los primeros auxilios.No obstante, por la complejidad de las lesiones, la niña fue remitida en una ambulancia al área de urgencias del HUS, donde permanece bajo observación médica.