El inicio de un nuevo gobierno, puede ser la oportunidad para que la industria automotriz cuente, por fin, con una política de largo plazo que sustente su crecimiento hacia el futuro.
Ya una parte del camino se emprendió durante la administración que termina su gestión el próximo 7 de agosto, pero la tarea es, ahora, implementar estrategias concretas, diseñar programas reales y proyectos viables que pongan al sector de automotores y autopartes en una ruta de crecimiento y competitividad más global.
Así lo considera el presidente de General Motors Colmotores, Santiago Chamorro, quien señaló que sin desconocer que durante la administración del presidente Alvaro Uribe, la industria encontró siempre puertas abiertas para plantear sus inquietudes y se avanzó en la construcción de una visión sobre su futuro, es ahora, en el gobierno que se inicia el próximo 7 de agosto con Juan Manuel Santos a la cabeza, cuando se tienen que implementar las estrategias concretas para llevar a esta industria a nuevos estadios de evolución en competitividad.
Trabajo en dos frentes
Para el presidente de la ensambladora de productos Chevrolet en Colombia el trabajo que hay por delante tiene que hacerse en varios frentes: unos competencia de las empresas y otros en cooperación con el gobierno.
En el caso de Colmotores se avanza en el desarrollo de mayores niveles de productividad.
Es así como se ha reducido el número de horas por vehículo de 42 a 24. También, como segundo punto de ataque está la reducción de los costos de los materiales y los costos de logística, que representan un porcentaje importante en el costo total del vehículo.
Pero es en el campo de la cooperación público privada en la que está el reto si de verdad se quiere tener una industria de ensamble de largo plazo. "En donde realmente necesitamos trabajar, o encontrar resultados es en ese diálogo de política automotriz donde de alguna forma se necesita tener una visión clara y para ello se necesitan decisiones en el corto y largo plazo".
¿Qué decisiones?
En esa definición de la política automotriz, la industria tiene claros varios de los aspectos que deberían mejorarse para hacerla mucho más competitiva.
Por ejemplo, señala Santiago Chamorro, uno de los aspectos que debe abordarse es la búsqueda de mecanismos para aplanar los niveles de IVA que se cobran a los carros. En la actualidad existen cerca de cinco porcentajes diferentes de este impuesto, de acuerdo con el tipo de carro que se adquiera, pero sin ningún sustento técnico sostiene el directivo. Y en la simplificación de esta tarifa "hay un porcentaje de solución importante".
También, señala, es fundamental cambiar el esquema de regir la definición del costo de producto solo por el valor de la materiales e incorporar el esquema del valor agregado, como lo hacen los grandes mercados automotrices. "El valor de los materiales no incorpora todas las inversiones importantes que se hacen por ejemplo en las fábricas de los ensambladores para tener un proceso cada vez más moderno y productivo, entonces es un tema en el que necesitamos trabajar en el corto plazo".
Es la hora de actuar
Y por este menú de estrategias que deben aplicarse, considera el directivo que también es necesario abordar el mejoramiento de la infraestructura, la preparación de la mano de obra calificada del sector, la transformación tecnológica del sector autopartista y el fomento a las exportaciones.
Estos, entre otros ingredientes, para elaborar una receta de éxito en el largo plazo para la industria y lograr que pueda pasar del ensamble, incluso a la fabricación.
Pico y Placa Medellín
viernes
3 y 4
3 y 4