Justo al lado de esa entrevista, publicamos las declaraciones del ingeniero Álvaro Villegas Moreno, fundador, accionista y actualmente asesor del grupo constructor CDO, envuelta desde el 12 de octubre de 2013 en toda clase de cuestionamientos derivados del desplome en El Poblado de la torre 6 de una de sus construcciones emblemáticas.
En dicha entrevista el expresidente de la Sociedad Antioqueña de Ingenieros y Arquitectos (SAI) controvirtió la orden de demolición de las torres 1 a 4 de Space emitida por autoridades municipales.
El también exgobernador de Antioquia y exalcalde de Medellín desmiente que el estudio de la Universidad de los Andes descartara como opción viable la "repotenciación" de las torres 1 a 4, y atribuye a animadversión y a motivaciones políticas las decisiones que se han tomado por parte del municipio y que afectan a su organización empresarial.
CDO insiste en la viabilidad de la "repotenciación" o la "rehabilitación" de las torres para no demolerlas. Se ampara en conceptos técnicos de ingenieros contratados por ellos, pero esa propuesta ha generado dudas razonables. El golpe a la credibilidad de sus ingenieros tras el derrumbe del 12 de octubre de 2013 fue demasiado alto como para aceptar ahora, sin más, dictámenes "inobjetables"
La tragedia del desplome de la torre 6, así como la posterior demolición de la 5 y la evacuación forzosa de las otras cuatro, conlleva la elevación de miles de reclamaciones de los afectados a la empresa constructora, que debe activar los mecanismos de reparación y cumplimiento de las garantías legales.
Pocos días después del siniestro, el gerente de Constructora Lérida CDO, Pablo Villegas Mesa, dijo a El Colombiano que "las víctimas de Space recuperarán su patrimonio", precisando incluso que si los fondos de la constructora se agotaban, acudirían a recursos del resto del grupo. Asumió con ello no solo la obligacón legal, sino un compromiso moral de una empresa y una familia de la que la sociedad espera un comportamiento a la altura de su trayectoria.
La constructora se aplicó a lograr acuerdos conciliatorios con los propietarios y arrendatarios. A esta fecha, hay acuerdos firmados y cumplidos con muchos, aunque subsisten varias reclamaciones de los copropietarios de las demás unidades residenciales, no solo de Space.
Con una torre caída, otra implosionada, y cuatro más inhabitables, las controversias son inevitables. Los copropietarios, de forma más que razonable, tienen la pretensión justa de que se les reconozcan los múltiples perjuicios causados.
Lo ideal es que todo se lograra de común acuerdo. Pero eso es utópico. Queda acudir a la aplicación cabal de las normas que protegen a los copropietarios y arrendatarios según el Estatuto del Consumidor, la ley de construcciones sismorresistentes de 1997, y el propio Código Civil. Teniendo en cuenta lo acuciante de los problemas generados por no poder habitar sus casas desde hace nueve meses, los procesos jurídicos deberán ser resueltos con la mayor prontitud y eficacia.
Falta ver si las medidas administrativas de embargo de los bienes del grupo CDO (incluyendo las cuentas de sus socios) y el inicio del proceso de liquidación judicial obligatoria, servirán para hacer ágiles los pagos a los afectados y suscribir acuerdos, o por el contrario, implicará someterse a una maraña burocrática, esa sí plagada de formalismos y demoras.
Ya en firme la orden de demolición, independiente de quién la paga, lo urgente es responder a los inversores. La empresa ha padecido un golpe de solvencia económica y reputacional, pero cientos de moradores lo han sufrido en su proyecto de vida. Confiamos en que todavía haya margen para evitarse costosos y largos pleitos judiciales.
TORRES DE SPACE SÍ SE PUEDEN REHABILITAR. ORDENAR DEMOLERLAS ES ARBITRARIO
Por ÁLVARO VILLEGAS MORENO
Socio y asesor del Grupo CDO
Es un hecho que las construcciones con problemas estructurales son susceptibles de repotenciar, a través de la intervención de la ingeniería estructural y más ahora, cuando disponemos de sofisticados programas informáticos.
Ordenar demoler las torres 1 a 4 de Space es una arbitrariedad, apoyada en un concepto desenfocado de la Universidad de los Andes.
La pregunta original que hizo el Inspector del Poblado fue “Si los edificios eran viables de repotenciar”. La respuesta de cuatro destacados ingenieros antioqueños fue afirmativa. Los Andes conceptuaron que lo ofrecido por nosotros era insuficiente como proyecto de rehabilitación. Obvio, eso no era lo que nos habían preguntado. Si se nos pregunta “¿cómo?”, entregaremos el estudio completo porque nuestros ingenieros tienen ya definido este tema a través de refinados estudios.
Es de anotar que un porcentaje de los 79 apartamentos de estas torres no son de nuestra propiedad. Por lo tanto, no podemos ejecutar la orden de demoler, como nos ha exigido erróneamente la Alcaldía.
Nunca le hemos solicitado a los propietarios de los apartamentos que una vez rehabilitados y esto sea oficialmente aprobado, tengan que retornar a estas viviendas. A quienes no lo deseen les devolveremos su inversión en términos de ley.
