El británico Lewis Hamilton, piloto de McLaren, aseguró que su victoria en Silverstone en 2008 fue "uno de los momentos más dulces y satisfactorios" de su carrera en la F1, y un recuerdo que siempre lleva consigo.
"Estar en lo más alto del podio y mirar por encima de la marea de banderas y rostros en la grada de enfrente fue, sencillamente, increíble", recuerda Hamilton, que afronta ahora el Gran Premio de Gran Bretaña, la semana próxima, con la sensación de que "muchas cosas han cambiado en el circuito y en el paddock".
El británico está convencido, no obstante, de que "los miles de aficionados serán tan apasionados como siempre".
"Vamos a tener que trabajar con nuevas interpretaciones de las reglas y, aunque eso va a afectar a todos los equipos, será interesante ver si se produce algún cambio en cuanto a la competición. Va a ser un fin de semana muy ocupado para los ingenieros", comentó en un comunicado de McLaren.
Para Hamilton, el circuito de Silverstone "es uno de los mejores del mundo". "Y creo que la llegada del DRS y el Kers híbrido harán de esta carrera uno de los mejores Grandes Premios británicos de la historia".
