A Paola Díaz, Nacional le ha dado más alegrías que tristezas. Sin embargo, la noche de este jueves y tras la derrota del conjunto verdolaga frente a Defensor Sporting, a la desazón por la derrota, se le sumó un hecho inesperado que afectó su imagen.
Paola, de 22 años, acompañó a uno de sus primos al hotel en el que el equipo uruguayo se concentró para el decisivo juego de Copa Libertadores en Medellín. Ella no vio nada de malo en ir con su familiar a este sitio, pero tampoco imaginó que una simple foto le causaría tanto daño.
"Nos dirigimos hacia el hotel porque ellos iban a cambiar unas prendas. Mi primo es hincha de Defensor y amigo de los seguidores que vinieron con ese equipo. Cuando llegamos al lobby del hotel todos los jugadores estaban ahí y comenzaron a molestarme, pero sin irrespetarme", señala Paola, cosmetóloga de profesión, luego de todo el escándalo en el que se ha visto inmiscuida.
"Una foto con la colombiana bonita, dijeron ellos", cuenta Paola. Ella no vio ningún problema en esa petición, pero no se imaginó lo que desencadenaría este viernes ese retrato en las redes sociales. Junto a Paola quedó el jugador Ramón Arias, central del equipo y que horas más tarde terminaría su festejo en uno de los clubes nocturnos de la ciudad.
Entre las risas por la felicidad que rondaba en el ambiente triunfalista de los uruguayos, uno de ellos le propuso a la joven que lo acompañara a la habitación, lo que fue rechazado por ella de forma inmediata.
"Los jugadores y algunos de los hinchas que vinieron, preguntaron que dónde habían prostíbulos. Yo creo que las fotos fueron en uno de esos lugares. Nosotros nos fuimos y hoy me levanté con esa noticia", relata en medio de la preocupación Paola.
Una foto
La mañana de este viernes y en medio de la tristeza por la derrota de Atlético Nacional, Paola como hincha fervorosa de este equipo, se levantó y revisó su celular. Para su sorpresa y tras el escándalo suscitado en la madrugada, rodaban por las redes sociales varias fotos en las que aparecían Ramón Arias y Matías Malvino, semidesnudos y junto a tres mujeres.
Junto a estas fotos empezó a circular la imagen de Paola y que fue captada bajo su consentimiento en el hotel por uno de los jugadores, pero que no esperaba que se utilizara para esos fines. Lo que explica Paola y quiere dar a entender es que no hay relación entre las dos situaciones y que quiere desvirtuar las acusaciones que "soy prepago por tomarme esa foto". Para ella, todo se dio en una situación casual.
El otro "rollo" de la historia y que hoy preocupa a Paola es su imagen. Tras los señalamientos, que según ella son falacias, ha tenido que enfrentar el escarnio público y hasta ofensas en su contra por esa imagen que se filtró de manera equivocada.
"No era que yo me quisiera tomar la foto con ellos, ellos fueron los que me pidieron la foto. Y ahora estoy emproblemada con los hinchas de Nacional porque me la están montando y tratándome mal. El domingo no voy a ir al estadio, porque me da miedo", dice.
Ella, hincha que ha acompañado al equipo por varias ciudades e inclusive países de Suramérica, reconoce que esta situación se puede prestar para un mal entendido, pero que fue afectada en su buena fe. No obstante, quiere proteger su imagen, que fue pisoteada por inescrupulosos en la web y de la cual muchos se han aprovechado para señalarla sin conocerla.
