Un Cristo de los Milagros colgado del cuello para recordar "a quién tenemos que pedirle ayuda en los momentos difíciles", fue uno de los recuerdos con los que salió ayer de San Pedro de los Milagros, el presidente Álvaro Uribe Vélez.
Luego de participar en una celebración litúrgica, el mandatario partió -por tercera vez en el día- una torta de cumpleaños, que compartió con el gobernador Luis Alfredo Ramos, las autoridades locales y los invitados especiales.
Pero la emoción del festejo no le hizo olvidar el principal motivo de su visita: hacerle un homenaje al presidente de la Cámara de Representantes, Óscar Arboleda Palacio, oriundo de esa población.
Indicó que el 20 de julio que comienza el nuevo periodo legislativo, Arboleda Palacio podrá entregar la presidencia de la Cámara satisfecho por haber "ejercido el orden con democracia".
Una muestra de su gestión, indicó Uribe, fue el continuo control que impuso en los horarios de trabajo: "puso a todo el mundo a madrugar a las 7 de la mañana".
Uribe también respondió a algunas de las solicitudes del alcalde Jaime Echeverri Marín, quien pidió su apoyo para sacar adelante dos vías: la ampliación de San Pedro-San Jerónimo, que cuesta $41.560 millones, y Alto de Medina-Bello, avaluada en $22.000 millones.
El Gobernador de Antioquia anunció el apoyo de la administración, pero insistió en que será necesario el respaldo de la Nación dada la magnitud del proyecto.
El Presidente comprometió a Findeter para que facilite la financiación a empresarios particulares de una terminal de transporte y centro de acopio que funcionen de forma integrada. Esta obra podría demandar una inversión de 2.500 millones.
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