Hernán no podía creer lo que estaba viendo a pocos metros de la glorieta de La Aguacatala en el empalme con la avenida Las Vegas: Un carro cerca al suyo iba tan despacio que parecía con una falla mecánica. Pero no. Estaba en perfecto estado. El motivo de la lentitud para transitar no era otro sino que su conductora estaba mandando un mensaje de texto.
"Estaba con los dedos pegados en la cabrilla y en el celular y ni miraba. Yo no me la creía", cuenta el joven a quien en otra ocasión un conductor distraído lo había puesto en riesgo de chocarse. La otra vez fue por los lados de La Mota y dice, entre risas, que también era una mujer la conductora.
La escena se repite, produce indignación y hasta hace soltar uno que otro madrazo. Lo peor es que maniobras como estas, que reducen el 50 por ciento la capacidad de reacción de los conductores y son consideradas inofensivas por quienes a diario las realizan, han ocasionado en lo que va corrido este año 1.100 accidentes de tránsito en todo en país.
En ellos, según informó el director de la Policía de Carreteras, general Rodolfo Palomino, han perdido la vida 152 personas y 1.502 resultaron heridas.
El problema es que la gente todavía no es consciente de la gravedad que representan acciones como encender un cigarrillo, cambiar la emisora o echarle un "ojito" a los niños que van jugando con el perro en la parte de atrás del carro. Estas, fueron calificadas por la Policía de Carreteras como los "pecados capitales" de los conductores colombianos.
Inteligencia vial
Para Evelio Orozco, director del Fondo de Prevención Vial en Antioquia, la campaña de Inteligencia Vial toca precisamente temas como estos.
En su concepto, uno de los "pecados" más comunes es enviar mensajes de texto o hablar por celular mientras se maneja. La resolución 3027 de 2010 establece que quienes usen "sistemas móviles de comunicación o teléfonos instalados en los vehículos al momento de conducir, exceptuando si éstos son utilizados con accesorios o equipos auxiliares que permitan tener las manos libres", deberán pagar una multa de 15 salarios mínimos legales vigentes, que equivalen en la actualidad a 267.795 pesos.
Pero hay otros "pecados" que se extienden. Uno de ellos es la costumbre, cada vez más extendida, de instalar monitores de televisión frente al asiento del conductor y que estos estén en funcionamiento mientras se maneja. "Se pueden utilizar mientras el carro no está en movimiento", dijo Orozco.
La otra situación que es riesgosa y exige el uso de la inteligencia vial es no manejar cuando están ofuscados, cuando están peleando con alguno de los pasajeros que va en el carro y, mucho menos, cuando entablaron una discusión por celular. En este último caso, el riesgo se incrementa si no se usa un manoslibres.
"La gente ha sido receptiva con las campañas, sin embargo hay lunares. El uso del celular es un tema importante porque ya no solo es hablar, sino que están mandando correos y mensajes por el Blackberry. A veces son como los niños que necesitan que alguien los vea. Miran si hay un guarda o un policía", señaló el funcionario.
¿Qué dice la gente?
A la hora de hablar sobre los "pecados" que todos cometemos al conducir, se puede aplicar perfectamente la cita bíblica de "es más fácil ver la paja en el ojo ajeno que la viga en el propio". La respuesta es "yo no, pero vi a....".
En las redes sociales el tema de la seguridad vial también tiene cabida. De un lado están las campañas oficiales del Fondo Nacional de Prevención Vial y la Policía Nacional y, de otro, iniciativas particulares, claro que algunas son más serias que otras.
En Facebook hay grupos de varios países en los que se llama la atención sobre el peligro de manejar bajo los efectos del alcohol y aunque tienen pocos seguidores y generan poco debate, dejan ver que hay una preocupación general por el tema.
Y es que el asunto es grave en todo el mundo. El año pasado, un estudio de la Universidad de North Texas señaló que, entre 2001 y 2007, murieron 16.000 personas en accidentes en los que un conductor estaba enviando mensajes de texto.
En Colombia está el grupo "No más víctimas por exceso de velocidad e imprudencia de los conductores", que tiene 115 conductores y surgió luego de un accidente ocurrido el 19 de octubre de 2008 en el que perdieron la vida tres personas, en la vía Santa Marta-Cartagena.
"Hoy podemos ser los conductores, mañana las víctimas, no más irresponsabilidad", señaló Paola Plata, la fundadora del grupo.
Por eso, antes de contestar ese mensaje en el chat de Blackberry mientras va manejando, o de pelear a los gritos con su acompañante en el carro, recuerde que esas acciones le quitan un 50 por ciento de reflejos. Los mismos que debe utilizar para llegar con bien a su casa y permitir que otros lo hagan.
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