En esta época donde la visita a la playa es para algunos uno de sus mejores planes, alcanzar ese color canela en la piel se convierte casi en una obsesión.
Erróneamente, muchos acuden a procedimientos de limpieza como exfoliaciones o tratamientos similares para, supuestamente, preparar su piel para recibir el sol, sin saber que esa puede ser la puerta de entrada a daños en la piel, pues se acaba con el manto ácido de la misma.
"Ese tipo de tratamientos pueden irritar la piel y después generar pigmentaciones y, como se remueve la capa superficial de la piel, se predispone a quemaduras", explica Freya Álvarez, dermatóloga de la Clínica Dermatológica.
Sin embargo, acudir antes de la exposición al sol a las duchas de autobronceo -diferentes a las cámaras- es la recomendación del dermatólogo Francisco Eladio Gómez, para proteger la piel y dejarla con una mejor apariencia.
El sol es acumulativo
Las alteraciones producto de una prolongada exposición al sol se ven solo a lo largo del tiempo, los daños no son inmediatos.
"Es importante saber que el sol que una persona tome se va sumando en el día a día de su vida. Además, el daño solar más importante ocurre en los primeros 20 años de vida", explica Campo Elías Páez, dermatólogo de la Asociación Colombiana de Cirugía Dermatológica.
Usar un antisolar con un factor de protección mayor a 30 es la primera medida que los expertos recomiendan, a la vez que es importante conocer el tipo de piel que cada persona tiene.
En el caso de las más blancas, un buen bronceado nunca será el resultado a pesar de la aplicación de autobronceadores, pues este tipo de pieles suelen enrojecerse.
Para aquellos que tienen un color un poco más canela, además de aplicarse protector solar en todo el cuerpo deben tener especial cuidado con su cara debido a la posibilidad de desarrollar manchas.
Las pieles más oscuras, aunque un poco más resistentes al sol, deben siempre aplicarse protector solar pues no están exentas de padecer algún tipo de alteración.
"Es muy importante dejar claro que para tener una piel saludable lo ideal no es exponerse al sol. El envejecimiento y los cánceres de piel están relacionados con la radiación solar sin embargo, a veces en temporada de vacaciones es inevitable no exponerse al sol", agrega Álvarez.
Evitar la exposición directa, estar a la sombra y usar ropa protectora cuando se hagan actividades al aire libre en el horario de mayor riesgo de radiación solar -entre las 9 y las 4 p.m.- es otra opción para protegerse. Un dato adicional para mayor protección: existen protectores solares que se consumen por vía oral que no evitan el uso del tópico, la mezcla de ambos disminuye el riesgo de quemadura e inflamación de la piel.
No hay que olvidar además la importancia de proteger los labios y el cabello, para ellos también existen elementos protectores. Y finalmente, durante la exposición directa al sol evite el consumo de cítricos, pues esa mezcla puede ser causa de aparición de manchas en la piel.
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