Así lo afirmó el pasado martes el supuesto asesino de la niña Tatiana Rodríguez Ocampo de 9 años de edad, asesinada en zona rural de Abejorral pasado mes de agosto.
El sujeto de 29 años y natural de Caldas, Antioquia, fue capturado durante la Feria de Ganado de Medellín el pasado martes por el delito de homicidio agravado.
La niña había desaparecido el primero de agosto, después de las 7:00 de la mañana, cuando salió de su casa con dirección a la escuela La Polka, según informo su padre a las autoridades y quien preciso que la menor estaba vestida con una blusa blanca, jeans azul y botas rosadas.
Luego de una búsqueda el sábado 3 de agosto, a las 5:00 de la mañana, en zona rural de la vereda en un cañaduzal, fue hallado el cuerpo sin vida de Tatiana con heridas ocasionadas con arma cortopunzante en diferentes zonas.
Mediante la labores investigativas la Policía, llegó a la conclusión que el homicida vivía en la misma vereda y que en los últimos días había huido con destino al departamento del Quindío, donde permaneció durante varios días hasta ser capturado.
Según indicó la Policía, los móviles obedecen a una venganza motivada por una confrontación que había tenido su hija con la occisa.
El capturado manifestó en la audiencia que "se le había metido el Diablo", tratando de explicar su actuación. Así mismo aceptó los cargos imputados por la Fiscalía y fue enviado a la cárcel.
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