Más de diez personas resultaron lesionadas y un centenar de casas arrasadas en un incendio en el estado de California que afecta a una lujosa área residencial donde tienen casas famosos como Michael Douglas y Oprah Winfrey, comunicaron este viernes los bomberos del condado.
Las llamas, originadas en la tarde del jueves en las colinas próximas a Montecito, en el condado de Santa Bárbara, al sur del estado, continuaron desplazándose sin control durante la noche empujadas por rachas de viento cercanas a los 100 kilómetros por hora y calcinaron más de 1.000 hectáreas de terreno.
Tres personas requirieron asistencia médica por quemaduras y una decena tuvo que ser atendida por inhalación de humo.
El avance del incendio obligó a la evacuación de casi 5.500 personas, que tuvieron que abandonar sus propiedades en plena noche mientras 500 efectivos de los equipos de extinción trataban de contener el fuego.
La cifra de bomberos se ha ido incrementando con el paso de las horas a medida que se iban sumando dispositivos de condados próximos, que además cuentan con apoyo de una decena de aeronaves.
Estudiantes refugiados
Según el Departamento Forestal y de Prevención de Incendios de California, 1.500 inmuebles se encontraban amenazados en un área con abundante vegetación, de robles y eucaliptos, donde personalidades del mundo del espectáculo como Michael Douglas, Rob Lowe y Oprah Winfrey tiene propiedades.
La popular presentadora Winfrey tiene un terreno de más de 17 hectáreas en el área.
Las autoridades instalaron un centro para evacuados en el instituto San Marcos, mientras que los alumnos de la Universidad de Westmon fueron convocados para refugiarse en el gimnasio del campus, donde las llamas dañaron decenas de edificios.
Las causas que originaron el incendio, que se desató el jueves a las 6:30 p.m. hora local (9:30 p.m. hora de Colombia) en un conocido edificio de la zona llamado Tea House, aún están por determinar.
Los bomberos advirtieron que las altas temperaturas esperadas para la jornada de este viernes podrían complicar las tareas de extinción, a pesar de que ha bajado la intensidad del viento.
